«No encuentro explicación. El sinsentido, la barbarie, el desapego a la vida y el matar por cualquier cosa». Durante todo la tarde del lunes las redes sociales manifestaron su indignación, su bronca y la necesidad de hacer justicia cuanto antes, como una reacción catártica e impotente por el asesinato de Uma Aguilera, la nena de 9 años que fue baleada en Villa Centenario, Lomas de Zamora, cuando sus padres la estaban llevando al médico.
Eduardo Adrián Aguilera (42) y María Eugenia Rodríguez Álvarez (41) trabajan en la Policía Federal. Aguilera forma parte de la custodia de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y Álvarez ejerce como perito en el área científica. «Estos criminales no tienen perdón. La van a pagar», afirmó con dureza la ministra, desde el Hospital Churruca, donde murió Uma.
Tanto Aguilera como Álvarez se encontraban en su día de franco y estaban llevando a su hija al médico, cuando fueron interceptados por un auto con al menos dos delincuentes.
Mientras Álvarez estaba cerrando el portón de su casa, Aguilera aceleró y los delincuentes realizaron dos disparos, uno de ellos impactó en la nuca de Uma.
El Círculo Policía Federal también un posteó un mensaje expresando su pesar por el fatal desenlace de Uma, «brutalmente asesinada por malvivientes al intentar sustraerles su vehículo. Desde lo más profundo del corazón enviamos nuestras más sentidas condolencias y acompañamiento a sus padres, amigos camaradas y amiguitos de Uma».
Con esta imagen de Uma Aguilera se está difundiendo una marcha que habrá este martes en Villa Centenario.El Instituto Mario Madeddu, de Villa Centenario, también emitió un comunicado en el que enfatiza «la profunda pérdida de nuestra hermosa y pequeña Uma Aguilera Rodríguez, alumna de cuarto grado», adonde asistía la chica asesinada junto con su hermana Iara.
«Uma era una chica hermosa, que la vi crecer desde que empezó primer grado y era puro corazon y dulzura, igual que su hermana», dijo la mamá de una compañerita de la chica asesinada.
Familia reservada
Conocedores de la inseguridad del barrio, tanto Aguilera como Alvarez hablaban con sus hijas mayores Iara y Uma, para evitar estar en la calle y jugar con amiguitos del barrio.
«Gente muy amable pero los padres trabajan todo el día y a las chicas no se las suele ver con los demás niños del barrio, tenían sus actividades en otro lado«, dijo una vecina de la cuadra, que prefirió no dar su nombre.
«Sabemos que la abuela de Uma vive aquí de toda la vida y residía en la misma casa que el matrimonio y las hijas», hace saber otro vecino de la cuadra. «Había un hermano de la señora (Eugenia Rodríguez Alvarez), también policía, que se suicidó».
Uma cursaba el cuarto grado en el Instituto Mario Madeddu.El radiopasillo está a pleno y otro señor comenta que «recién ahora me entero, por las noticias, que el muchacho es custodio de Bullrich. Una familia respetuosa, pero que decía poco».
Junto con su hermana mayor Iara (13) -hay otra hermanita bebé-, Uma jugaba al handball y practicaba artes marciales en el club Defensores de Banfield, que emitió un comunicado expresando su dolor y que permanecerá cerrado este martes, en señal de luto.
Lo mismo sucedió con la Federación Metropolitana de Balonmano: «Con mucho pesar lamentamos el asesinato de Uma, jugadora de Defensores de Banfield, víctima de un hecho delictivo. Extendemos nuestras sinceras condolencias para su familia en este momento de profundo dolor. ¡Justicia por Uma!».
Los vecinos convocan a una marcha por UmaAllegados a Uma y vecinos de Lomas de Zamora convocan a una marcha para exigir justicia y seguridad. Será este martes a las 19 en Pío Baroja y Martín Rodríguez, en la esquina donde ocurrió el terrible asalto.
MG