El adolescente de 17 años que cayó desde el sexto piso del hotel donde se alojaba durante su viaje de egresados en Bariloche fue dado de alta este jueves en el sanatorio de Rosario donde había sido trasladado luego de aquel accidente. Ahora continuará con la recuperación en su domicilio después de someterse a varias cirugías, producto de múltiples fracturas.
Las imágenes de su salida de ese centro de salud fueron tomadas por las cámaras de El Tres. Se lo vio encapuchado, con sus piernas vendadas y acompañado de sus padres, antes de subirse a la ambulancia que lo trasladó desde el sanatorio Parque, alrededor de las 16, después de pasar más de 20 días internado.
El joven estudiante de un colegio técnico de Rosario, que inicialmente fue llevado de urgencia al Hospital Privado Regional (HPR) de Bariloche, donde estuvo en terapia intensiva, y luego fue trasladado a Rosario después de evidenciar una mejoría en su estado de salud, debió ser intervenido quirúrgicamente para reparar sus miembros inferiores y reconstruir la parte facial.
El episodio ocurrió durante la madrugada del miércoles 28 de agosto, cerca de las 5.50, en el hotel Interlaken, de las calles Palacios y Vicealmirante O’Connor, a cinco cuadras del Centro Cívico, donde se hospedan varios contingentes de estudiantes.
“Pucho”, tal como lo llaman sus compañeros, había vuelto de bailar en el boliche Grisú. Según el fiscal Martín Lozada, la caída se produjo cuando el chico empezó a jugar con sus amigos arrojando hamburguesas por la ventana.
Según consignaron medios locales, el adolescente rosarino resbaló y cayó en un patio interno. El primer informe del Cuerpo de Investigación Forense indicó que el joven se fracturó ambas rodillas, la pelvis y el macizo facial.
El fiscal destacó la rapidez con la que recibió asistencia médica y aseguró que Thiago estuvo consciente y nunca perdió el conocimiento.
«Fue una boludez adolescente, lo hice sin pensarlo«, admitió el también vocalista de Kia» (Killer in Action), una banda de new metal que formó hace dos años con tres amigos, cuando el panorama sobre su salud era mucho más alentador que al inicio.
Ya con la tranquilidad de que Thiago recibió el alta, sus amigos mostraron su alegría en declaraciones a Telefé Rosario. “Por día éramos más de diez personas en la habitación y él contento. Nunca se lo vio mal. La evolución que tuvo en 20 días con la terrible caída que tuvo es impresionante”, comentaron quienes también son sus compañeros en ese grupo musical de new metal.
ES
