La Semana Mundial de la Lactancia Materna, un evento anual que se conmemora entre el 1 y 7 de agosto en más de 170 países, es una oportunidad para promover la relevancia que tiene la leche materna en la nutrición y crecimiento saludable de los bebés. De hecho, la OMS recomienda la lactancia exclusiva hasta los seis meses. Después, aconseja mantener esta práctica acompañada de alimentos complementarios hasta los dos años o más, según lo que desee la madre y el bebé.
Sin embargo, en Argentina, sólo el 53% de los bebés de hasta 180 días se alimentó exclusivamente con leche materna en el 2022. En algunas provincias, el porcentaje es muchísimo más bajo, como en Catamarca que representa el 30%, en Córdoba (40%), La Rioja (40,5%), San Juan (41,3%) y Tucumán (43,5%). Así lo advierte el informe «Los desafíos de la lactancia exclusiva y su continuidad desde la perspectiva de las madres», elaborado por el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA (ODSA-UCA).
Se trata de un estudio cualitativo, a cargo de Ianina Tuñón, investigadora del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, y de su equipo de investigación. que propone renovar el análisis de los desafíos relacionados con la lactancia materna exclusiva y su sostenibilidad en el tiempo. La muestra considera la perspectiva de las madres con variados perfiles sociodemográficos y socioeconómicos que están transitando los primeros días de vida de sus hijos (3 a 15 meses).
¿A qué factores responden estas cifras? Son multicausales. El principal problema es la falta de acceso a la información y la ausencia del Estado que debería invertir recursos en políticas públicas y en protocolos que se lleven a cabo en todo el territorio argentino.
“Necesitamos una lactancia basada en información y no naturalizarla. Hay que objetivar los problemas y trabajar en términos de formación, sensibilización y acompañamiento integral de la mujer lactante lo cual requiere construir estructuras de oportunidades por parte del Estado, el mercado y la sociedad en su conjunto”, destaca Tuñón.
En efecto, para muchas madres y futuras madres, la lactancia durante el embarazo no es un tema de consulta ni de formación por parte de los obstetras y parteras porque en cierto sentido se la” idealiza”.
Es que al momento del nacimiento del bebé parece producirse un proceso de estandarización del proceso de la lactancia que incluye posiciones para sostenerlo, frecuencia y cantidad de las tomas, extracción de leche materna, entre otros. “Pero, en realidad, estos protocolos requieren de un tiempo de asimilación por lo que sería oportuno que formen parte de la preparación previa al parto”, subraya el estudio.
La mayoría de los problemas que surgen durante la lactancia se deben a una mala técnica, como una postura inadecuada, un mal agarre por parte del bebé o bien a ambas cosas. Por eso, lograr el bienestar biopsicosocial de la mamá lactante es fundamental para que la lactancia pueda sostenerse en el tiempo.
¿Por qué en Tik Tok, por ejemplo, no puede estar presente el Estado dando cuenta de los beneficios que brinda la lactancia materna?, interpela Tuñón. La democratización de la información implica también que el sector público de salud pueda acceder a ese conocimiento y la presencia de campañas en los medios y en redes sociales donde están las madres más jóvenes quienes pueden compartir sus experiencias.
El caso de Chaco ilustra una experiencia exitosa ya que en 2022 el 65,8% de los bebés de hasta 180 días se alimentaron exclusivamente con leche materna gracias al programa “Preparación integral para la maternidad” del Hospital Perrando que ofrece el acompañamiento del sistema médico previo y en el momento inicial de la lactancia.
La lactancia materna aporta beneficios para el bebé, la madre y la sociedad. Foto: UnicefEn este marco, cobra relevancia la Encuesta Permanente de Hogares procesados por el Observatorio de la Deuda Social de la UCA que ubica a la región de Gran Resistencia, Chaco, como la más pobre del país con una tasa del 79,5%. También estima que la pobreza alcanzó al 54,9% y la indigencia al 20,3% de la población argentina en el primer trimestre del año. Incluso, la mayoría de las regiones tienen niveles de pobreza por encima del 50%. No obstante, la intervención del Estado permitió superar la media en los niveles de lactancia materna.
Caída en la tasa de natalidad
La Tasa Bruta de Natalidad mide la frecuencia de nacimientos por cada mil habitantes de una población dada. El informe de la UCA muestra que, desde 2017, la tasa bruta de natalidad en Argentina tuvo una merma significativa en la lactancia, principalmente en las mujeres de edad reproductiva con menor nivel educativo. Entre 2016 y 2022, la Tasa de Natalidad en Argentina descendió de 16,7 % a 10,7 %. Es una caída histórica en el país.
Este dato puede leerse como otro indicador de la profunda caída de la tasa de natalidad en cinco años y cómo este fenómeno puede representar una oportunidad para asignar recursos para brindarles formación en lactancia y así empoderar a las mujeres.
“Es una oportunidad para que los escasos recursos del país puedan invertirse en procesos de formación y acompañamiento de lactancia materna exclusiva la cual es fundamental para el desarrollo del capital humano de los niños al inicio de su vida”, estudia Tuñón.
Caracterización sociodemográfica y ocupacional
Según la Encuesta de INDEC del cuarto trimestre de 2023, entre las madres en edad reproductiva de 14 a 49 años, el 38,3% están inactivas, es decir, no trabajan ni buscan empleo; pero el porcentaje asciende al 62% entre las que están en edad reproductiva con secundario incompleto.
La situación, que se profundiza con la maternidad, revela que hay una porción importante de mujeres con bajo nivel educativo en quienes el nacimiento de un bebé y el proceso de lactancia asume un rol importante, en términos de integración social. “Es una oportunidad para empoderarlas en la militancia y relevancia social de ese rol”, destaca Tuñón.
Asimismo, el informe concluye que la transmisión intergeneracional de prácticas parece ser más habitual en primerizas de menor nivel educativo promedio que en pares de niveles educativos más altos y que en los sectores populares el rol paterno es eminentemente proveedor.
Otros indicadores
Otros de los factores multicausales que funcionan como barreras de acceso en el mantenimiento de la lactancia materna exclusiva son la infraestructura en el ámbito laboral que dificulta esta tarea. Por eso, el desafío es que también el Estado y el mercado puedan flexibilizar las condiciones laborales de las lactantes ampliando licencias, generando espacios de lactancia adecuados
Beneficios y fortalezas
“La verdad es que él necesita su pecho, su leche materna, y yo necesito su amor porque es el momento en donde se conecta mamá e hijo y todos los problemas y lo que pasa alrededor no importa, es nuestro momento, nuestro vínculo, tal cual lo sentí yo en la panza, es muy sagrado” (Lact. Excl.-Primerizas-Sec.Compl./Catamarca). El testimonio recogido por el informe revela una de las tantas fortalezas que representa la exclusividad de la lactancia materna.
En principio, la leche materna es más segura e higiénica, nunca es de mala calidad y está disponible a temperatura justa. A través de la leche materna, se transmiten anticuerpos que son factores de protección contra las enfermedades más comunes hasta que el bebé sea capaz de formar sus propios anticuerpos.
La lactancia tiene beneficios para el bebé, su madre y la sociedad. Facilita la recuperación del tamaño normal del útero, se asocia a una menor propensión de cáncer de mama, permite un mejor control del peso, representa una fuente de nutrientes esenciales, protección de enfermedades, desarrollo cognitivo, emocional, bienestar digestivo, entre otros.
Es importante subrayar que para aquellas madres a las que se les imposibilite amamantar a sus bebés, ya sea por condiciones médicas que contraindican la lactancia o porque el bebé está bajo el cuidado de un tutor que no es la madre, las leches en fórmula (también conocidas como «leches infantiles» o «leches maternizadas») son alternativas saludables para proporcionar una nutrición adecuada.
Aunque no contengan anticuerpos naturales ni otros componentes inmunológicos, proporcionan una nutrición adecuada para el crecimiento y desarrollo del bebé. En cuanto al vínculo afectivo, se desarrolla a través de múltiples interacciones, no solamente durante la lactancia.
Marco normativo
La Ley de Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo y la Primera Infancia o “Ley 1000 días” (Ley 27.611, 2021), Ley de Lactancia, Promoción y Concientización Pública (Ley 26.873, 2013) y la Ley de Derecho de los Padres y la Persona Recién Nacida (Ley 25.929, 2004), son el marco normativo del país.
PS