El juicio oral que se le sigue al capo narco Néstor Fabián “El Negro” Rojas (47) por el asesinato de un socio en Misiones y su rol de líder del Primer Comando de Frontera (PCF), una organización que se dedicaba a traficar grandes volúmenes de droga desde Paraguay, ingresó en la recta final.
En su alegato, la fiscal federal Vivian Barbosa pidió la condena a prisión perpetua por considerar que mató a balazos al mecánico Aldo “Polaco” Canteros (31) para asegurarse impunidad y así continuar con el narcotráfico.
Pese a que Rojas negó ser el autor del crimen, existen escuchas telefónicas en las que reconoce haberlo matado. Y cuando fue detenido se halló en su poder la pistola calibre nueve milímetros con la que ejecutó a su socio ante la sospecha de que lo había traicionado.
Esta no es la única causa penal que Rojas, conocido por tener su propio himno, tiene abierta en Misiones. También debe responder por haber contratado sicarios para matar a un juez que lo investigaba por un doble homicidio son sello narco en Posadas, tras haber perdido una carga de marihuana que había sido despachada en un camión cisterna.
Este viernes, antes de los alegatos los jueces escucharon el testimonio del suegro del mecánico Canteros. Oscar Machado sostuvo que su yerno lo presentó a Rojas como su compadre y que momentos antes del crimen compartieron un asado.
Además contó que luego de la sobremesa hubo una discusión entre ambos, aparentemente por una mujer. El hombre dijo que en medio de esa pelea salió corriendo del lugar, en la zona rural de Gobernador Roca, y a la distancia escuchó los disparos. “No vi quien tiró”, aseguró ante los jueces.
Aldo Canteros (31), el mecánico asesinado en Misiones. Para la Justicia Federal y de Misiones, Rojas no es un narco más, sino el lider de una organización narcocriminal muy poderosa y peligrosa que manejaba grandes cargamentos de marihuana que tenían como destino el Conurbano y también Brasil. Cuando lo detuvieron, Rojas tenía más de tres kilos de cocaína que, se cree, iba a enviar a Chile.
Sospechas de traición y la ejecución de un socio
El 5 de agosto de 2018, Rojas advirtió algunos movimientos raros en las cercanías de la casa de Canteros, un mecánico y chapista que le fabricaba doblefondos en camionetas y coches para el transporte de la droga. Canteros le había ofrecido su casa para guardar un cargamento de casi dos toneladas de marihuana que había ingresado de Paraguay.
Para eso, cavaron una enorme zanja no muy lejos de la vivienda y allí enterraron las bolsas para “enfriarla” y esperar el momento indicado para despacharla. Pero todo se precipitó ese 5 de agosto a la tarde y Rojas no dudó en sacar la pistola 9 milímetros que llevaba en la cintura para terminar con la vida del mecánico.
Toda esa secuencia quedó grabada en una escucha telefónica que había ordenado la Justicia Federal, que ya estaba tras los pasos del lider del PCF. “El Polaco nos jugó sucio, nos apretaron hoy entre cuatro tipo ahí (…) casi me mataron ¿entendés? Le volé la cabeza, le volé la cabeza a él, a su compinche y los otros salieron corriendo. Se hicieron pasar por milicos y me iban a matar”, le contó a un integrante de la banda para justificar el crimen.
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Tras asesinar a su socio, el mecánico Aldo «El Polaco» Canteros (31), en su chacra de Gobernador Roca (Misiones) el capo narco Néstor «El Negro» Rojas (46) cuenta que lo mató porque lo traicionó. Canteros recibió dos tiros en la cabeza, uno en una pierna y otro en el abdomen. Rojas irá a juicio por este homicidio y dos causas de drogas.
“Le metí bien en la cabeza, así nomás te digo ¿entendés? (…) yo le metí plomo así nomás te digo”, insistió. Y le pidió que no lo llamara más por teléfono, que usaran un sistema de mensajería para comunicarse.
El 13 de agosto de 2018, Rojas fue detenido en el complejo La Aventura, de Posadas cuando negociaba la compra de un cargamento de cocaína. En la casa de un pariente, se encontró el arma que se usó en el crimen de Canteros.
En septiembre de 2019, Rojas había sido trasladado de urgencia desde Misiones a la cárcel de Ezeiza porque se descubrió un plan para rescatarlo de la unidad penal donde estaba alojado. La fuga se iba a concretar con ayuda de cuatro brasileños fuertemente armados que fueron detenidos en la ruta, camino a la cárcel de Puerto Rico.
Las dos toneladas de marihuana encontradas en la casa del mecánico. Desde Ezeiza organizó el crimen del juez Fernando Verón, que no se concretó por el cierre de las fronteras a causa de la pandemia de coronavirus. Los sicarios habían sido contratados en Brasil.
De acuerdo a una investigación de la Justicia Federal, con apoyo de la Procunar, desde su celda y sólo en 2020, Rojas habría organizado el contrabando de más de 10 mil kilos de marihuana y por lo menos 20 kilos de cocaína.
Durante el juicio oral declararon varios agentes de inteligencia de la Prefectura Naval que operan en la zona Norte de Misiones. Tras el decomiso de un cargamento de marihuana, los investigadores comenzaron a trabajar en la zona. “Los lugareños nos brindaron información sobre un grupo que acopiaba estupefaciente para mandar a Buenos Aires… nos hablaron sobre un paraguayo llamado Carlos Sosa como el organizador de todo y obtuvimos su teléfono”.
En septiembre de 2023 detuvieron con 390 kilos de marihuana a un ladero del capo narco Fabián «Negro» Rojas, que operaba desde la cárcel.Fue la misma gente de la zona la que luego corrigió la identidad del dueño de la droga. “Nos dijeron que era Néstor Rojas, más conocido como “El Negro”. Les había facilitado el número para que les avisara si había operativos de Gendarmería o Prefectura
La Justicia Federal autorizó realizar escuchas sobre ese número y así fueron surgiendo los lugares que frecuentaba Rojas y también sus colaboradores más cercanos, entre ellos Canteros. Los agentes encubiertos también localizaron un domicilio de Rojas en la localidad de Hipólito Yrigoyen y el de Canteros y los vehículos en los que se movilizaban.
Uno de los prefectos dijo que vio a Rojas dos días antes del crimen. “Salieron de la chacra de Canteros en un Logan y fueron hasta el centro. Canteros se bajó a un kiosco y Rojas se quedó. Iba en el asiento del acompañante y tenía la ventanilla baja”. Con esa impunidad se manejaba uno de los narcos que ahora está a un paso de la prisión perpetua.
Misiones. Corresponsal
MG