En Villaguay, Entre Ríos, un grupo de adolescentes está cambiando su futuro gracias a una iniciativa innovadora de inclusión educativa. Zoe y Juan, ambos de 19 años y residentes del barrio Las Rosas, tomaron la decisión de completar sus estudios secundarios en la Escuela Secundaria Municipal de Artes y Oficios Rogelio Martínez. Zoe se especializó en auxiliar de carpintería y Juan en herrería. «Lo que más me gustó fue la forma en que nos enseñaron. Aprendí cosas que no encontraría en otras escuelas. Ahora, con mi título, sé que puedo trabajar en cualquier lugar tranquilamente», expresó Zoe.
Esta escuela, incorporada recientemente al sistema educativo formal de Villaguay, es parte de un esfuerzo más amplio para revincular con la escuela a las y los adolescentes que la abandonaron. “Encontramos estudiantes con trayectorias interrumpidas. Los identificamos porque dialogamos con ellos”, cuenta Daniela Azambuyo, referente MUNA local. Similarmente, en Bolívar, provincia de Buenos Aires, la Dirección de Juventudes lidera el «Operativo movilizando juventudes», un programa destinado a revincular a adolescentes que dejaron de estudiar. «Nuestro objetivo es que los pibes estén dentro de la escuela», enfatiza José Aristondo, responsable del proyecto.
Según datos del CENSO 2022 hay 300 mil adolescentes de 12 a 17 años que no asisten a la escuela (INDEC; 2022). Entre quienes asisten al nivel secundario, un 23% lo hace con sobreedad (ME, 2022) y el 66% de los jóvenes de entre 20 y 22 años cuenta con educación secundaria completa (INDEC; 2022). Existen fuertes desigualdades de acuerdo con el nivel socioeconómico.
Muchos chicos abandonan la escuela por cuestiones económicas. Foto: UNICEFLa tasa de conclusión de la educación secundaria en jóvenes de 20 a 22 años es de 37% para los sectores más pobres y de 85% para los de mayores ingresos (UNICEF; 2023). Las causas de abandono suelen tener motivos tanto escolares como extraescolares: respecto a los primeros, el 28% abandona la escuela porque no le gusta o no la considera necesaria y el 9% se quedó libre por faltas. En relación con los segundos, el 12% afirma haber tenido dificultades económicas y el 9% por cursar un embarazo o tener que cuidar a hijos o hermanos menores (MICS 2019).
Ambos municipios enfrentan desafíos similares: no solo revincular a los adolescentes al sistema educativo, sino también garantizar que permanezcan y completen sus estudios. «Nuestro enfoque es estratégico y adaptativo», destaca José sobre las metodologías utilizadas en Bolívar. Con el apoyo de redes comunitarias y recursos locales, estos esfuerzos están marcando una diferencia tangible en la vida de muchos jóvenes argentinos.
Villaguay y Bolívar son dos de los 36 municipios de nueve provincias que están abordando la línea “Inclusión educativa de adolescentes fuera de la escuela”, que propone la iniciativa Municipio Unido por la Niñez y la Adolescencia (MUNA) de UNICEF. A partir de allí se busca asegurar la inclusión en el sistema educativo formal de chicas y chicos que no asisten a la escuela.
Los municipios buscan atraer a los chicos a la escuela. Foto: UNICEFLa estrategia se propone, en primer lugar, identificar a las y los adolescentes que no asisten a la escuela; luego, a partir del trabajo territorial, acercarlos a instituciones educativas nuevamente y, junto con las escuelas y los municipios, elaborar un plan para que sostengan su escolaridad y finalicen los estudios secundarios.
A través de MUNA, UNICEF busca garantizar los derechos de las infancias y adolescencias en las comunidades, entre ellos, el derecho a la educación. “El objetivo es fortalecer las capacidades de los municipios, con formación, materiales y asistencia técnica en temáticas como primera infancia, inclusión educativa, entornos saludables, entornos libres de violencia y participación adolescente”, explica Sebastián Waisgrais, Especialista en Inclusión Social de UNICEF Argentina.
La iniciativa se desarrolla en más de 100 municipios de nueve provincias y cuenta con el compromiso de 890 funcionarios y personal técnico involucrados en su implementación. Así, UNICEF trabaja para que más de cuatro millones de niñas, niños y adolescentes sean alcanzados por las acciones definidas en el marco del proyecto.
Desde Villaguay hasta Bolívar, la educación está transformando vidas y abriendo puertas hacia un futuro más prometedor para una generación que merece cada oportunidad para crecer y prosperar. Para poder continuar, el compromiso solidario es clave. UNICEF necesita de la colaboración de personas solidarias en todo el mundo para que ninguna niña, niño o adolescente se quede atrás. Podes colaborar donando mensualmente con tarjeta al 0810-333-4455 o ingresando en unicef.org.ar/unsol.
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