El trágico episodio que protagonizó el piloto Juan Manuel Medina (46) en la ciudad de Rosario, en Santa Fe, durante el mediodía del pasado viernes, cuando la avioneta que manejaba se estrelló contra una planta industrial y provocó su muerte en el acto, aún continúa siendo materia de investigación.
Ahora, la Justicia citará a familiares de la víctima y a los representantes de la empresa Air Liquide para intentar esclarecer qué pasó con el piloto. Según pudo saber Clarín, la fiscal a cargo de la instrucción, Mariela Oliva, solicitó informes al aeroclub de donde partió la avioneta e informes sobre el piloto y, paralelamente, documentación a la empresa en relación a la versión e información informal que hay en relación a su vinculación.
“Las hipótesis son preliminares e informales por el momento. Hay tareas investigativas en curso para corroborar con documentación toda la información recabada hasta el momento”, señalaron fuentes judiciales.
Medina contaba con más de 500 horas de vuelo y vivía en la ciudad santafesina. Desde junio de 2023 había sido empleado de la compañía ubicada en inmediaciones de Presidente Perón al 7600, en la zona oeste de Rosario.
«Medina era piloto comercial de avión y aeroaplicador –un piloto que se dedica a lanzar productos químicos desde un avión. Tenía mucha experiencia. Tenía su psicofísico, de renovación anual, vigente hasta abril de 2025. Cumplió todos los reglamentos del club y de ANAC», conversó con Clarín un socio del Aeroclub Rosario, donde la víctima participaba activamente.
De hecho, el Aeroclub Rosario emitió el sábado un comunicado que subió como historia en su cuenta de Instagram, en el que lamentó la pérdida del piloto fallecido y se puso a disposición de sus familiares y amigos.
«A los grandes mentirosos»: uno de los posteos previos a la tragedia. En el mismo también refirió que la tragedia del pasado 9 de agosto ocurrió con una aeronave de su flota. Asimismo, comunicaron que están recabando toda la documentación requerida por la Junta de Seguridad de Transporte y la Fiscalía interviniente para esclarecer los hechos sucedidos.
Medina había renovado su licencia hacía cuatro meses, sin ninguna clase de inconvenientes. Sin embargo, la firma Air Liquide, que se dedica a la venta de oxígeno, lo había despedido semanas atrás. Según pudo saber Clarín, figuraba como empleado al menos hasta marzo. En esa empresa fue donde se estrelló con el Cessna 152 matrícula LV-OJF y murió en el acto. La aeronave se usaba para instrucción y para vuelos de los socios del club.
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Ocurrió en inmediaciones del predio de la empresa Air Liquide Argentina, en Presidente Perón al 7600, zona oeste de Rosario.
«Shockeados, aún sin entender bien», expresó el socio del Aeroclub sobre lo ocurrido. Sobre los momentos previos a la tragedia, describió: «Se lo ve realizando el chequeo previo (del avión) en forma normal, cargando combustible junto a otro piloto del club, chequeando aceite también. Y 20 minutos después del despegue saltan los primeros videos en las redes y la baliza de emergencia del avión».
El impacto fue cerca de las 12 en un depósito de la fábrica, donde había peligro de explosión debido a la existencia de elementos inflamables en el predio, como oxígeno, hidrógeno y nitrógeno para uso medicinal.
El insinuante estado de WhatsApp del piloto que chocó en una fábrica de RosarioDespués de conocerse el accidente, la Policía realizó un allanamiento en la casa de Medina donde secuestró celulares y computadoras. Se cree que habría dejado señales del presunto plan. Publicó a las 9.39 en su estado de WhatsApp una foto en la que se ve una enorme explosión. También dejó un posteo con su foto en la cabina del avión y la leyenda: «A los grandes mentirosos».
Esta información se la hicieron llegar a la fiscalía allegados a la víctima. Medina era “un muy buen piloto”, según contó a los medios Jorge Martínez, quien fue uno de sus instructores.
MG
