«Quedaba todo en la nada… si no estaba ese video quedaba todo en la nada. Los testigos temblaban, solo una de las testigos no demostró temor. El resto temblaba», cuenta Lucía Sánchez Cáceres (42), la esposa de Claudio Hernán Romano (39), que murió el 1° de octubre de 2019 luego de que tres policías de la Ciudad le dispararan siete veces en Villa Crespo.
Ramón Pérez (44), la inspectora Beatriz Manzanelli (46) y la oficial Daniela López (37) llegaron al juicio en libertad y están acusados de «homicidio agravado por abuso de autoridad y uso de arma de fuego».
La fiscalía pidió la pena de prisión perpetua para los tres policías porteños. En el mismo sentido se expresó la querella, en manos de María del Carmen Verdú, de la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi).
La defensa de los agentes, en cambio, solicitó sus absoluciones al consideraron que se trató de una «legítima defensa» y que actuaron «en legítimo ejercicio de su deber».
Hay un periodo de media hora en el hecho que, después de cinco años de investigación, todavía no tiene una explicación.
Video
Policías de la Ciudad matan de 9 balazos a un remisero, que los había atacado con un cuchillo.
«No sabemos qué pasó antes de esto porque se ocuparon de tapar todo, las cámaras previas al hecho desaparecieron, nadie sabe qué pasó con Claudio y no lo vamos a saber nunca porque los policías de la Federal se ocuparon de encubrirlo. Algo le hicieron, de eso estoy segura», especula Lucía sobre la media hora entre las 10.39 en que chateó con su pareja sobre el trabajo, la familia y la rutina del día, y las 11, cuando terminó apuñalado, ensangrentado y baleado por tres policías.
Claudio Hernán Romano vivía en Monte Chingolo, Lanús. Trabajaba como remisero y todos los días, desde hacía meses, llevaba y traía pacientes que iban a hacer rehabilitación a un centro a metros de Malabia al 900. Todos los vecinos lo conocían, incluso la consigna policial que custodiaba la cuadra.
El VW Polo en el que se trasladaba el remisero.«Las imágenes captadas por las cámaras de la cuadra de la calle Malabia al 900 no dejan espacio para la duda ni el debate. Claudio estacionó su auto, en doble fila, detrás de un patrullero. Por razones que no conocemos, se bajó y se dirigió a la ventanilla del móvil policial. Tenía algunas heridas superficiales de arma blanca en el abdomen y las muñecas, cuyo origen tampoco conocemos», explicaron desde Correpi en un comunicado.
«Lo que sí sabemos, porque está filmado, es que Claudio introdujo su brazo derecho, en el que tenía una navaja tipo karambit, por la ventanilla del patrullero, y realizó un movimiento, para de inmediato correr rodeando la tropa del auto. El policía Pérez, que estaba al volante del patrullero, tuvo una lesión también superficial en el cuello (NDR: y en un dedo de la mano izquierda). En ese instante, sonaron dos disparos, uno de Pérez, otro de su acompañante, la oficial Manzanelli, que impactaron en la ventanilla del lado derecho del patrullero», expresaron en línea con la acusación de la fiscalía.
La escena del crimen, en Malabia al 900.Claudio cayó herido. Según quedó probado en el juicio, los testigos lo vieron tendido en el suelo sin conseguir levantarse.
Los policías bajaron del auto y, de acuerdo a las imágenes que se difundieron y que aportó el portero de un edificio vecino, cuando intentó apoyar el codo en el piso Pérez le pateó la cabeza con fuerza dejándolo una vez más, inmovilizado en el suelo.
Claudio permaneció de costado, con una puñalada, dos disparos y después de una feroz patada en la cabeza. En un segundo intento por incorporarse rodeado por los tres policías, volvieron a tirarle: los tres dispararon entre dos y tres balazos cada uno aunque estaba herido y desarmado.
Secuestraron una navaja a metros del cuerpo de Claudio Romano.«Para que reaccionara así, fue porque le hicieron algo, por algo fue a Pérez. Es muy raro que haya desaparecido justo el video de los 15 minutos previos a esto», se queja Lucía.
Además, agrega: «Un solo testigo declaró que vio a otra persona acuchillada pero no hay ningún registro de eso, aclaró que no era Claudio pero no hay cámaras ni ellos lo reportaron, incluso en las modulaciones se escuchó que piden ambulancia para Pérez, la telefonista le preguntaba por Claudio y él le aclaró que lo único que importaba era el personal policial».
Claudio Hernán Romano (39), el hombre que murió al ser baleado por agentes de la Policía de la Ciudad en el barrio de Villa Crespo.Lucía es veterinaria, vivía con sus dos hijos, de una relación anterior, y con Claudio, que no tenía familia en Buenos Aires. Este miércoles espera que «los policías se vayan presos de la sala» y tener un poco de justicia. El Tribunal Oral en lo Criminal N° 12 dictará la sentencia a las 12.
EMJ