14.4 C
Resistencia
27 septiembre, 2024

Prepagas: tras el DNU de Javier Milei, las facturas de enero llegan con fuertes aumentos y habrá más ajuste en 2024

Cuando se empieza a sentir un efecto “anestesia” frente a los dolorosos porcentajes que elevan los precios de los alimentos y la indumentaria -por mencionar ítems clave a pasos de las Fiestas-, no es mal momento de ir tragando el alza que tendrán las cuotas de las prepagas en enero y qué se espera para el 2024, incluso en los casos de afiliados que vinieron teniendo «descuentos en los aumentos» luego de haber apelado al subsidio que vino dando el Gobierno en base a su declaración jurada de ingresos.

Clarín confirmó con tres importantes empresas de medicina prepaga que este viernes empezaban a confeccionar las facturas correspondientes a enero con un ajuste de entre el 38% y el 42%, según el plan; pero también, según la compañía, ya que el fatigante decreto 70/2023 que el Presidente Javier Milei firmó esta semana habilita a las entidades a ajustar sus precios de manera libre, autónoma y completamente desregulada del Estado.

Como las empresas están obligadas a comunicar los aumentos con un mínimo de 30 días de antelación, la fecha de vencimiento de las próximas facturas será, de manera excepcional, no a comienzos sino a fines de enero, se pudo averiguar.

Si bien distintas fuentes confirmaron que la comunicación de las nuevas cuotas vino estando retenida (a la espera de la definición oficial sobre la tan ansiada desregulación), hay facturas que ya fueron emitidas con los montos viejos, en particular las de los afiliados que abonan por débito automático.

Es incierto cómo manejará el tema cada empresa (varias que prometieron dar precisiones, al cierre de estas líneas no las habían compartido), pero se estima que algunos clientes podrían recibir, en los próximos días, una factura adicional con el ajuste correspondiente.

Las facturas de las prepagas empezaron a llegar con un fuerte aumento para enero.Foto: Luciano ThiebergerLas facturas de las prepagas empezaron a llegar con un fuerte aumento para enero.Foto: Luciano ThiebergerHace años que las prepagas reclaman la capacidad de acción que ahora ganaron: salir de la “jaula” (usando una expresión de una de las fuentes del sector) que las tenía a la espera de las autorizaciones de aumentos discrecionales del Gobierno. Sin embargo, el momento en el que ganan estar a sus anchas las pone en una disyuntiva nada simple.

Es que, mientras aseguran estar perdiendo contra la inflación hace 11 años, pero muy especialmente hace 4 y de manera sostenida, comprenden que recomponer lo perdido, en poco tiempo, “es absolutamente imposible”. Y lo es por la sencilla razón de que “se perdería buena parte de la cartera de clientes”, razonaba uno de los voceros, “cosa que nadie quiere porque se resolvería un problema generando, al mismo tiempo, otro: una baja en el número de clientes y por lo tanto, en los ingresos totales”.

Las empresas de medicina prepaga señalan que los aumentos autorizados en 2023 fueron del 137%, muy por debajo de la variación del Índice de Precios al Consumidor anual, que -según cuán dramática termine siendo la inflación de diciembre- rondará el 200%.

Además, “como variables a tomar en cuenta, los medicamentos aumentaron 217% en el año y los salarios del sector, cerca del 160%. El aumento de la cuota de las prepagas no llegó a equiparar el incremento de los costos”, se quejaba el dueño de una de las compañías, al tiempo que, con realismo, afirmaba: “Pero dependerá de cada compañía, de la estructura de costos de cada uno, cómo se maneja la cuestión, ahora que se recuperó la soberanía».

«Cada uno tendrá que ver de qué manera se recupera lo perdido. Algunas lo harán más gradualmente que otras. Nuestra intención es mantener una posición flexible”, confirmó.

A todo esto hay que sumarle un dato poco menos que inquietante, y es la situación especial en la que están los afiliados que en 2023 vinieron declarando tener ingresos menores a seis salarios mínimos vitales y móviles para tener aumentos mensuales achicados. Esas personas tuvieron un ajuste anual de (¿solo?) 106%, lo que -coincidieron dos fuentes- los tiene, hoy, pagando cerca de un 40% menos que el resto de los socios. ¿Qué pasará en esos casos?

El Gobierno de Alberto Fernández les compensó a las entidades esos “descuentos en los aumentos”, pero para los usuarios, lo que pareció un beneficio quizás haya sido una bomba de tiempo. Como se está viendo con todo, se pateó el problema para después y ahora es después.

Las precisiones desde las empresas sobre cómo manejarán estos casos son pocas, ya que, según se pudo averiguar, cada una lo hará a su modo.

¿Alguna se animará a recomponer el doloroso 40% atrasado (la cuota total, digamos) “de una”, y encima de eso le colocará el 38%-42% del ajuste de enero? Sería prácticamente una duplicación de la cuota de un mes a otro. Nadie lo descarta pero las voces consultadas aseguraron que intentarán optar por un esquema de gradualidad.

Saben que la cartera de clientes se achicará, pero quieren que ocurra en la menor medida posible, afirmaron. Aunque por estas horas nadie se anima a pronosticar cómo se calcularán los aumentos mes a mes, todo indica que incluirán (desde ahora y mientras el “decretazo” no sea impugnado en el Congreso o por la Justicia) la variación porcentual de inflación del período anterior.

La pregunta es si a eso le calzarán, además, unos 10 puntos porcentuales, durante cinco a seis meses, S. O si, como estimó una fuente a modo de ejemplo, “se hará más gradualmente, por ejemplo, 5% por encima de la inflación en unos 10 meses. Todo depende, realmente, de cuál sea la inflación. Todo depende del mes a mes”.

SC

Últimas Noticias
NOTICIAS RELACIONADAS