En un acto que desafía la lógica, el sentido común y la prudencia al volante, un conductor decidió llevar de paseo a su caballo en un Renault 19 por las rutas de Córdoba. La insólita travesía quedó registrada por la copiloto de otro automovilista en la tarde del 1 de enero y el video no tardó en hacerse viral.
El peculiar suceso tuvo lugar sobre la ruta provincial 17, cerca de la localidad de Marull, unos 170 kilómetros al este de la ciudad de Córdoba. En el video, se observa al caballo asomando su cabeza por una de las ventanillas traseras del vehículo.
«Esto es Córdoba, señores. Se ve de todo un poco, cosas raras y no tan raras, pero la verdad es que nunca había visto un caballo arriba de un 19», relata el hombre, que a duras penas pudo controlar la risa y consiguió describir la escena.
Vanesa, que fue la persona que logró captar el momento con su teléfono, compartió su experiencia y dejó planteada una duda en diálogo con El Doce.
Así iba el caballo adentro de un auto por una ruta de Córdoba.«Cuando le pasamos al lado, los vidrios eran oscuros y solo se veía la cabeza, no sabíamos cómo iba el cuerpo», confesó, también con dificultad para contener las risas.
Por las dudas, acaso necesario ante una situación tan absurda, aclaró que el caballo no iba al volante. En ese sentido, aseguró que logró ver a un humano conductor, aunque sigue siendo un misterio si contaba con la compañía de algún otra persona adentro del coche. Además del caballo, claro.
Otro caballo viral arriba de un Renault 12 cordobés
Si bien parece increíble el video del caballo asomado por la ventana de un Renault 19, no se trata del primer caso. Unos años atrás otro video similar se viralizó, también en la provincia de Córdoba.
Aquella vez se vio la trastienda del paseo del caballo, que -quedó en evidencia- no es lo mismo que un paseo a caballo. Se observó al hombre, con la facilidad de los hábitos, cargar al animal de cuatro patas en el vehículo.
Primero, retiró el asiento trasero y lo guardó en el baúl del auto. Luego abrió una de las puertas traseras y empujó al animal adentro del coche. El caballo, manso y acostumbrado, no se resistió: entró y terminó echándose a sus anchas.
Un instructivo, paso a paso, de la rutina de lo extraordinario.
En aquella oportunidad no se conocieron más detalles sobre la persona que lo filmó ni sobre el protagonista. Sí quedó claro que era en Córdoba, la provincia con más equinos como copiloto.
AGE
