Los 13 grados de temperatura mínima registrados en la madrugada de este martes llaman la atención. La máxima anunciada tampoco parece de verano: la previsión indicaba apenas 22 grados. Tras la inusual y trágica tormenta del fin de semana, el viento del sudeste terminó de imponerse en el ambiente, para consolidar el desconcierto en este diciembre frío y extraño, a sólo cinco días de la Nochebuena.
El dato no hace más que marcar una tendencia que Clarín informó a comienzos de este mes. La proyección del Servicio Meteorológico cambió y ahora se espera que, al menos en la zona de Capital, Conurbano y la Costa Atlántica (también en la costa patagónica) las temperaturas promedio no sean mayores de lo habitual, como se pensaba hasta noviembre que ocurriría. La humedad, en cambio, sí se estima que excederá los valores normales.
Esa tendencia es la que ya, efectivamente, se está advirtiendo, según un relevamiento en base a datos oficiales correspondiente a la primera quincena de diciembre, que permite observar un importante contraste con respecto al mismo periodo de 2022. Los valores, a caballo del fenómeno consolidado de El Niño, aparecen ahora alterados, en comparación, tanto en temperatura como en humedad.
El año pasado, durante las dos semanas señaladas había habido nueve días con temperaturas por encima de los 30 grados. Es decir, el 60 por ciento del total. En cambio, en este diciembre de 2023, en los mismos 15 días relevados hubo uno solo en el que termómetro superó los 30 grados. Esto significa apenas el 6 por ciento.
La contracara es la humedad. En 2022 había habido cinco días con 80 por ciento de humedad o más, mientras que en 2023 ese volumen de tiempo se duplicó y fueron diez las jornadas bajo esas condiciones. Una de las características de El Niño es, precisamente, que propicia un ambiente más húmedo y lluvioso.
Una imagen del Club del Pejerrey, junto al Río de la Plata en Quilmes, este lunes. Foto: AFPEn suma, al sacar el promedio de temperaturas máximas de esta primera parte de diciembre la cuenta da que en el presente año la aguja se ubica en 25,3 grados, mientras que en 2022 había trepado a 30,6 grados. En cuanto a la humedad, la diferencia indica en el promedio de picos diarios un 73 por ciento en 2022, contra un 81 por ciento en 2023.
En cuanto a las temperaturas mínimas también se puede apreciar una diferencia notoria entre ambos fines de año. En 2022, nueve de los 15 días no sólo tuvieron marcas por encima de los 20 grados, sino que siete se ubicaron entre los 22 y los 25 grados.
En 2023, las mínimas por el momento han sido más amables, con siete días por debajo de los 20 grados y tres en esa marca. La noche más calurosa de este periodo fue la del 13 de diciembre, cuando la temperatura no descendió de los 25 grados.
Al observar las marcas de temperatura máxima día por día se termina de entender por qué este diciembre se siente tan agradable, sobre todo para estar en la Ciudad. La seguidilla desde el 1° al 15 del mes este año ha sido la siguiente: 29, 27, 21, 21, 21, 22, 23, 22, 23, 26, 27, 32, 29, 27, 30. En 2022, en cambio, la serie fue así: 23, 26, 26, 33, 31, 33, 35, 37, 38, 29, 36, 29, 27, 32, 25.
Si la tendencia continúa según la previsión del SMN, el mismo patrón de temperatura y humedad se repetiría tanto en enero como en febrero. Hasta allí llega por ahora el informe climatológico oficial, apoyado en que “en el trimestre diciembre, enero, febrero 2023/24 hay 100 por ciento de probabilidad de que continúen las condiciones Niño”.
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