A un año de la conquista del Mundial de Qatar 2022, en el que fue uno de los protagonistas estelares de la Scaloneta con sus sólidas intervenciones, Emiliano Martínez sigue demostrando que sus reflejos están intactos y que luce dispuesto a llevar lo más alto posible al Aston Villa de Unai Emery en la Premier League. Lo demostró en la remontada ante Brentford, al que venció por 2-1 en un partido repleto de nervios que se jugó GTech Community Stadium. Así no le pierde pisada a Arsenal, que le ganó 2-0 a Brighton y es puntero a la espera de lo que suceda entre Liverpool y Manchester United.
El arquero argentino, que volvió a la titularidad en el club de Birmingham luego de haber descansado en el 1-1 contra el Zrinjski por la Europa League, mostró lo mejor de su repertorio. Y eso que se quedó afuera del podio para los premios The Best de esta temporada. Parece que no lo ven seguido los electores.
El ex Independiente tuvo una notable intervención de arranque. Corrían 7 minutos cuando el marplatense le tapó una pelota increíble a Mikkel Damsgaard. El danés remató libre de marca desde el punto penal luego de un error del polaco Matthew Cash que había desembocado en un desborde y centro atrás del alemán Vitaly Janelt.
Dibu esperó hasta el último instante y se zambulló contra la pelota. No la pudo retener, pero evitó un gol que parecía hecho y permitió que sus compañeros de la defensa pudieran alejar de un zapatazo el peligro.
Parecía que Martínez se encaminaba a otro partido con la valla en cero. Sin embargo, un mal despeje de Álex Moreno a la salida de un córner le dejó la pelota servida a Keane Lewis-Potter, quien remató cruzado y dejó sin chances al argentino al término del primer tiempo.
Ya en la segunda parte, con los Villanos buscando el empate, Dibu volvió a lucirse para ahogar un grito de Brentford. En este caso, otra vez con reflejos de acero, desactivó un cabezazo a quemarropa del francés Yoane Wissa, quien quedó solo frente al arco luego de un desconcierto de la defensa visitante.
La victoria, o mejor dicho el empate, parecía una misión imposible para Aston Villa. Sin embargo, todo se abrió cuando Ben Mee vio la roja luego de una dura entrada sobre el jamaiquino Leon Bailey. El árbitro David Coote le había mostrado amarilla, pero el VAR lo llamó y terminó cambiando la amonestación por la expulsión.
Así las cosas, el equipo de Dibu empezó a merodear el área rival. Y fue así cómo Álex Moreno tuvo revancha y, de cabeza, marcó el gol del empate para los de Birmingham cuando faltaban 13 minutos para el final del encuentro en el GTech Community Stadium.
Y ni qué hablar cuando corrían 40 minutos del complemento cuando Ollie Watkins metió un cabezazo goleador luego de un córner que en el primer palo fue desviado de taco por Boubacar Kamara. Un golazo.
Ya en tiempo de descuento, Martínez casi coprotagoniza un blooper. Bailey le pasó la pelota desde casi la mitad de la cancha y Dibu reaccionó tarde. Quiso tirarse con los pies para controlar la pelota, pero no pudo y terminó en córner tras rozar la parte externa de su arco. En esa jugada, el francés Neal Maupay le pegó un hombrazo al argentino cuando fue detrás del balón para sacar rápido el tiro de esquina y se llevó de recuerdo una amarilla.
La bronca siguió y Martínez volvió a tener un encontronazo con Maupay que terminó en una minibatalla campal. Parecía que se llevaba una tarjeta, pero el que pagó los platos rotos fue Kamara, quien agredió a un rival. Fue un final caldeadísimo de partido. Pero lo importante para Aston Villa es que sigue con onda verde y entreverado en el lote de vanguardia de la Premier League.