Fitur es uno de los mayores escaparates para que cada país, comunidad autónoma, provincia y ciudad luzcan sus mejores galas para atraer todo tipo de visitantes, además de una oportunidad para cerrar reuniones corporativas o presentar resultados. La edición de este año llegó precedida de un nuevo récord de visitantes, hasta 84 millones de turistas visitaron España en 2023 y las pernoctaciones hoteleras también han marcado cifras históricas el año pasado. Ifema, el recinto ferial de Madrid, es el lugar en el que cada año se dan cita todos los actores del sector. Y cuando decimos todos, es todos. Desde presidentes autonómicos con tiempo para confraternizar con la oposición, como es el caso Emiliano García-Page, a los grandes empresarios del sector, como Gabriel Escarrer o los hermanos Matutes. Ni el presidente de Ecuador (país invitado en esta edición), Daniel Noboa, quiso perderse la cita y se acercó hasta Madrid a pesar de que hace apenas unas semanas ha declarado un conflicto interno en su nación. Además, esta edición de la feria también guarda extravagancias varias, como la tirolina instalada por Puerto Rico para volar por el patio del recinto ferial, la propuesta de Vincci Hoteles para pasar la noche en una suite que la cadena ha instalado en su expositor o la presencia de un stand de Palestina que invita a visitar Tierra Santa en plena ofensiva bélica de Israel.
Pero sin duda uno de los expositores con más potencial de entre los 806 que se han desplegado en los nueve pabellones de Ifema para llamar la atención del visitante curioso, el periodista o el presidente autonómico, es el de Andalucía. La Comunidad Autónoma ha llevado a Fitur 2024 la campaña Andalucian crush con la que ha apostado por modernizar la imagen que quiere vender al turista. La región, que ha explotado durante años el turismo de sol y playa, deja a un lado las flamencas y las castañuelas para proponer al visitante disfrutar del amplio legado cultural de Andalucía. La expresión inglesa crush, además de haberse convertido en uno de los extranjerismos preferidos por las generaciones más jóvenes para representar el concepto de enamoramiento repentino, se ha hecho hueco en el mundo de la publicidad como reclamo de un producto atractivo para el consumidor.
Y Andalucía lo ha aprovechado para proyectar una imagen moderna y abierta al mundo. La región ha echado el resto en Fitur 2024 con un expositor que ocupa buena parte del pabellón 5 de Ifema con unos 6.500 metros cuadrados y en el que están representadas las ocho provincias que conforman la comunidad autónoma. Mientras la región aprovecha para dar un vuelco a su comunicación turística, Madrid ha recogido el guante y se ha quedado con el flamenco y las castañuelas. En el stand de la Comunidad de Madrid podía disfrutarse el miércoles de un espectáculo flamenco. La región que alberga la capital de España presume de ser Capital Mundial del Flamenco, uno de los reclamos que ha adoptado la región para promocionar la oferta cultural.
La feria ha acogido entre este miércoles y este domingo en Ifema a más de 150.000 profesionales del sector. Las expectativas esperan que el evento deje hasta 430 millones de euros en la economía regional. Se espera que durante el fin de semana pasen por la feria unos 100.000 asistentes. Las estimaciones apuntan a que en la 44 edición de Fitur participen un total de 8.500 personas procedentes de todas las comunidades autónomas, de numerosas empresas y de más de 152 países, 90 de ellos con representación oficial internacional.
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, acompañado por el consejero de Turismo, Cultura y Deporte Arturo Bernal durante el acto de inauguración del pabellón de Andalucía en Fitur. Álex Zea / EP
Nuevas experiencias
Como Fitur trata en gran medida de presentar nuevas experiencias, en esta edición la organización ha decidido poner a disposición de los asistentes una nueva atracción que simula uno de los atractivos de Puerto Rico, el ToroVerdeAdventure Park, que cuenta con una tirolina de hasta 152 kilómetros por hora. Se trata de la primera vez que se ha llevado a cabo una iniciativa así. En las instalaciones del recinto ferial los más atrevidos podían tirarse desde una gran tirolina de 10 metros de altura que recorría todo el patio y que era gratuita. Gratis, por cierto, a diferencia de comer, que podía suponer un importante desembolso para los asistentes a la feria. Los menús en algunas cadenas de restaurantes podían alcanzar los 25 euros y comprar un almuerzo en un food truck en el patio de la feria para comerlo en un banco, también rondaba los 20 euros.
Vista de la tirolina de 10 metros de altura, que se puede disfrutar gratuitamente en la avenida central del recinto de Ifema y que ha sido instalada en colaboración con la delegación de Puerto Rico. EFE
Por otro lado, la cadena Vincci Hoteles también ofreció a los asistentes de Fitur por primera vez la oportunidad de quedarse a dormir en un expositor de la feria. La cadena ha diseñado una «especie» de habitación de hotel para los «huéspedes» que quieran alojarse. En el exterior de la suite representa la fachada del mítico Vincci Capitol, un auténtico símbolo del skyline de la capital y de la Gran Vía madrileña con su chaflán en el que se ubica el cartel con neones de colores. En su interior, se pueden encontrar prácticamente todos los elementos que hay en un hotel real.
Otras de las experiencias curiosas de Fitur 2024 es la posibilidad de navegar de forma virtual a bordo de uno de los veleros de la Copa América, que este año se celebrará en Barcelona. La Diputación de la ciudad condal estima que más de 1.500 millones de personas de 190 países seguirán esta competición náutica. Y además de la Copa de América de Vela, Barcelona ofrece en su expositor turismo de bienestar y el enoturismo, como anticipo al año de la Región Mundial Gastronómica, que Cataluña ostentará en 2025.
Habitación de Vincci en Ifema. Cedida
Conflictos regionales
Aunque pueda parecer que un conflicto es incompatible con el turismo, en Fitur las propuestas de viajes vienen incluso de los lugares más peligrosos. Es el caso de Ecuador, este año como país invitado. El objetivo «principal» del ministerio de Turismo de Ecuador es «devolver la confianza a los mercados internacionales y a los turistas» tras la ola de violencia en el país y la declaración del «conflicto armado interno», según ha señalado el ministro del ramo, Niels Olsen.
Vista de estand de Palestina en la Feria Internacional de Turismo FITUR, este jueves en Madrid. EFE
Y a pesar de la dramática situación que se vive en Oriente Medio, ni siquiera la castigada Palestina ha querido perder la oportunidad de promocionar la visita a Tierra Santa. Su antagonista, Israel, también ha estado presente en esta edición de Fitur 2024, pero la distancia entre ambos países vecinos ha sido de varios metros en Ifema. Los protagonistas del otro gran conflicto regional de estos tiempos, Ucrania y Rusia, han decidido este año abstenerse de participar en Fitur 2024 y no han instalado expositor.
Vista de estand de Palestina en la Feria Internacional de Turismo FITUR, este jueves en Madrid. EFE
La masificación llega a Fitur
La masificación y los efectos del turismo sobre las comunidades locales ha sido una de las principales preocupaciones que el sector ha expresado en varios foros previos a Fitur 2024. La propia feria, al igual que algunos de los destinos turísticos más populares de España, también ha sufrido los efectos de la masificación. Cientos de periodistas y ponentes tuvieron que esperar largas colas en el estreno de la feria, a pesar de que las acreditaciones se habían repartido días antes. Los controles de seguridad y la comprobación de las acreditaciones una por una provocaron un importante cuello de botella para la entrada de los informadores, obligados a pasar un control al nivel de los que se realizan en los aeropuertos. Algunos de los eventos y reuniones programadas en Fitur 2024 fueron víctimas de la masificación que sufren algunas poblaciones de la costa española y tuvieron que retrasarse.
Una vez dentro de la feria, la masificación también se dejó sentir a la hora del almuerzo. Las colas para conseguir comprar los menús ofertados en restaurantes y establecimientos y food trucks, incluso a precio de oro, con algunos menús de hamburguesa a 25 euros, podían durar hasta 45 minutos.
Como en todas las grandes citas de estos tiempos, no podía faltar la referencia a la sostenibilidad. Ifema se ha pertrechado con papeleras de colores para separar la basura y se han repartido cubiertos de cartón para evitar el plástico. También durante el encuentro se ha apostado por difundir prácticas como el alquiler de vehículos eléctricos.