Según informaron fuentes oficiales, «el Presidente no viajará al Vaticano porque debe seguir adelante con las tareas que demanda la transición. La visita al Sumo Pontífice se reprogramará para cuando ya esté instalado en España luego de dejar el gobierno el 10 de diciembre».
Además, confirmó que residirá en España tras finalizar su período como Jefe de Estado.
En relación a su futuro, el mandatario habló para el diario español El País y dijo: «Tengo algunas propuestas para irme a España a volver a dar clases. Me parece que está bien que tome distancia».
«Felipe González decía que los expresidentes somos floreros chinos, porque somos valiosos pero no saben adonde meternos. Hay que dejar que el que llega pueda trabajar sin tener eso que uno tuvo desde el primer día, que fue el acoso permanente de no dejarnos hacer», siguió contundente.