Tras el contundente triunfo del peronismo en las elecciones legislativas de la provincia de Buenos Aires, con más de 13 puntos de diferencia ante LLA, Axel Kicillof y Sergio Massa celebraron juntos mediante una foto con un curioso gesto, levantando tres dedos. Mientras tanto, en el búnker de Fuerza Patria en La Plata, la militancia entonaba cánticos que pedían al gobernador bonaerense como conductor de cara al 2027.
La imagen que se viralizó exhibe a dos de los líderes del movimiento haciendo un gesto con la mano que muestra los tres dedos. Se asume que es una alusión al porcentaje de las supuestas coimas que iban dirigidas a Karina Milei, según el escándalo del caso de los audios del extitular de la Agencia Nacional de Discapacidad, Diego Spagnuolo.
Massa y Kicillof también se abrazaron y, desde el escenario, el gobernador lo mencionó antes que a la presidenta del Partido Justicialista. “Gracias Sergio. Gracias Cristina, injustamente condenada, que tendría que estar en este escenario”, expresó Kicillo.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
La repercusión internacional de las elecciones bonaerenses: una “prueba política” para Javier Milei
Luego de que la Junta Electoral bonaerense difundiera los primeros datos oficiales, en la sede platense los militantes entonaron: “Borombon bon, borombon bon, es para Axel la conducción”, siendo uno de los temas más coreados.
Desde el Hotel Grand Brizo también se escuchó, “este pueblo no cambia de ideas, lleva las banderas de Evita y Perón”, al igual que frente a la casa de Cristina Kirchner, en San José al 1111, donde permaneció Máximo Kirchner, lider de La Cámpora, durante el domingo por la noche.
Sergio Massa: forjador de la unidad peronista
Pese a no ser protagonista estelar ni recibir el centro de atención como las elecciones pasadas, la confirmación de la paliza electoral de Fuerza Patria fue una reivindicación para Sergio Massa. El excandidato a presidente fue clave en los meses previos para reconstruir los puentes de diálogo entre dos sectores que llegaron fragmentados y enfrentados al cierre de candidaturas.
Luego de una unidad precaria alcanzada en la provincia de Buenos Aires, Sergio Massa llegó a ser considerado como posible cabeza de lista de Fuerza Patria para las elecciones del 26 de octubre. Sin embargo, las presiones de Juan Grabois y el recuerdo todavía reciente del fracaso del Frente de Todos terminaron por frustrar esa opción, y el tigrense optó por correrse de la disputa.
Cómo fue el resultado de las elecciones en el interior de la provincia de Buenos Aires
El pasado miércoles, durante un acto peronista, el gobernador bonaerense brindó elogios a Massa por su dedicación a la política nacional. Entonces el líder del Frente Renovador entró en un estado de emoción y recordó los sacrificios que tuvo que hacer para mantener competitivo al peronismo.
En 2023, Massa había surgido como candidato presidencial de unidad del peronismo, cumpliendo al mismo tiempo su tarea como ministro de Economía, en una etapa de alta complejidad para el gobierno del Frente de Todos y para la economía del país. Después de quedarse a tres punto de ganar en primera vuelta y de la asunción de Javier Milei, el tigrense eligió hacer silencio y solo apareció para dar testimonios en pocas ocasiones.
En esta ocasión, el que fortalece su imagen dentro del peronismo de cara a las presidenciales de 2027, con ayuda de Massa, es Kicillof. Máximo Kirchner, quien hasta hace poco criticaba el desdoblamiento de la provincia, aún no rompió el silencio públicamente.
BGD/ML