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Resistencia
12 junio, 2025

LPO en GPS: “Quieren a Cristina presa para que baje el riesgo país”

El director de La Política Online, Ignacio Fidanza, analizó en el programa GPS que conduce Rolando Graña las consecuencias de un posible fallo de la Corte Suprema que determine la detención de Cristina Kirchner.

En la sección LPO en GPS, el programa de los domingos en América, Fidanza dijo que “el fallo ya está escrito”, pero aclaró que podría demorarse por la filtración pública. “No hay que descartar que solo cambien la fecha por el hecho de que la haya filtrado uno de ellos”, señaló.

Fidanza se refirió al impacto político y económico que podría tener la detención de Cristina y su consecuente exclusión electoral. “Cristina hoy, según la mayoría de las encuestas, tiene chances altas de ganar la Tercera Sección electoral con 50 puntos, por una diferencia muy grande porque el gobierno está sin candidato. Si ella es candidata en la Tercera y la diferencia es abismal, eso puede generar un triunfo a nivel de toda la provincia por la cantidad de gente que vive en el Conurbano sur”, señaló.

“Entonces, la posibilidad de un triunfo no ya de Cristina en la Tercera, sino de un triunfo del peronismo en septiembre, al gobierno le pega en un lugar muy jodido que es el riesgo país, que cuando Cristina empezó a calentar motores con su candidatura, empezó a subir”, continuó.

“El gobierno tiene una necesidad de dólares total y necesita que baje el riesgo país para tomar dólares. Esto es, digamos, un posible efecto que ellos van a vender a los mercados, que es ‘bueno, Cristina ya no es candidata, este riesgo no existe'”, sostuvo el director de LPO.

Fidanza dijo que Cristina ya sabe que terminará detenida. “El viernes pasado en una reunión con dirigentes del peronismo bonaerense les dijo, ‘tenemos que ir viendo quién es la segunda candidata porque tal vez sea la que quede'”, reveló.

“¿Qué imagina Cristina? Porque si ya está resignada a que la van a meter presa, ¿cómo se imagina después de esto? ¿Es soñar con ser Lula?”, le preguntó Graña. “Sí, esa analogía circula permanentemente, que Lula pasó de 500 días presos a presidente. Esto le da una centralidad. A nadie le gusta estar preso, pero en términos políticos esto le da a ella una centralidad y unas herramientas que no tenía hace dos semanas”, completó.

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