La Unión Cívica Radical defendió este martes la dura sanción a los cuatro diputados nacionales que respaldaron el veto total del presidente Javier Milei a la ley de aumento jubilatorio que había sancionado al Congreso y abrieron una incógnita respecto al jefe del bloque de la Cámara Baja.
«Creemos que fue la medida correcta. Hubo mucha indignación en el seno del partido este movimiento extraño de estos diputados», planteó Gastón Manes, el presidente de la Convención Nacional Radical, que también apuntó al jefe de la bancada Rodrigo De Loredo, uno de los dirigentes que salió a cuestionar la sanción.
«No se trata de diferentes miradas, el bloque vota dividido desde el principio del gobierno de Milei. El tema es el cambio (de voto) de un proyecto que había presentado el radicalismo. Sospecho que De Loredo estaba al tanto de la situación y casi de acuerdo, sino no se comprende«, remarcó.
De Loredo dijo que la decisión de la Convención fue «inédita» y también la calificó de tener un tinte de «gran irresponsabilidad y parcialidad selectiva».
«No es la primera vez que miembros del Bloque votan de manera diferente. Ni en Diputados ni en Senadores. No tiene ningún efecto directo sobre el Bloque de Diputados Nacionales de la UCR. Cualquier decisión sobre la conducta de los diputados que integran nuestro Bloque será tomada entre los pares, buscando siempre los consensos y sin posturas sesgadas dentro de un partido que incluye pluralidad de miradas», manifestó el presidente del bloque de la UCR en la Cámara Baja.
El lunes, la Mesa de la Convención, que lideran Manes como presidente y Hernán Rossi como secretario general, votó a favor de que se suspenda a Mariano Campero (Tucumán), Martín Arjol (Misiones), Luis Picat (Córdoba) y Pablo Cervi (Neuquén), que visitaron la Casa Rosada y se sacaron una selfie con el Presidente en la previa del debate que se destrabó en favor del Gobierno gracias al voto de esos radicales.
El titular de la convención dijo que hubo un gran consenso en la decisión de suspender a los legisladores nacionales, hasta que el Tribunal de Conducta decida su expulsión del partido, junto con la suerte de Roxana Reyes y Gerardo Cipollini, de Santa Cruz y Chaco respectivamente, quienes estuvieron ausentes a la hora de votar.
Gastón Manes, presidente de la Convención de la UCR.Además, hubo un quinto diputado radical que había visitado la Casa Rosada y luego cambió el sentido de su voto en favor del oficialismo: se trata del correntino José Tournier, que en rigor no está afiliado al partido, a pesar de formar parte del bloque.
«El partido viene muy vapuleado y quiero destacar que mientras estos diputados votaron en contra, 25 votaron a favor de insistir con la ley. El partido radical esta firme en relación a la ley aunque no se haya podido ratificar», sentenció Manes.
El dirigente del radicalismo también se refirió al asado en la Quinta Presidencial de Olivos, que esta noche recibirá a los 87 legisladores que ratificaron el veto presidencial.
«Hay que repensar si esta gente no piensa que los partidos políticos no deben existir, proque no son una patente de corso para que cada uno haga lo que quiera. Un partido es una comunidad de ideas», concluyó Manes.
Luis Petri también se metió en la interna de la UCR: «Las suspensiones tienen tufillo a faccioso»
El ministro de Defensa, Luis Petri, se metió en la interna radical y cuestionó las sanciones de la Convención Nacional del partido.
La Convención no vota en el Congreso, votan los Diputados elegidos por el pueblo. Las suspensiones a legisladores de la UCR tienen un tufillo a faccioso que no se corresponde al respeto, tolerancia y disenso de una fuerza política», sostuvo Petri. Y sentenció: «Ganen en internas, no en el escritorio del partido!».
Alfredo Cornejo dijo que la sanción a diputados radicales «es una decisión tonta» y advirtió por «correlatos electorales pésimos»
En medio de la interna radical y de rumores de ruptura de bloque, el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, salió a cuestionar duramente la decisión de la Convención.
«Suspenderlos y expulsarlos es tan ridículo, que va a dejar al radicalismo en una posición de ínfima minoría con correlatos electorales pésimos. Es realmente una decisión tonta, arbitraria, injusta, de doble vara», afirmó en diálogo con radio Mitre.
El mandatario provincial dijo que la decisión tomada por la mesa que encabeza Gastón Manes «no representa a la mayoría de los simpatizantes radicales», quienes también acompañan la línea gruesa de los cambios que impulsa el gobierno del presiente Javier Milei.
El lunes, tras la decisión de la convención radical, Cornejo realizó un posteo en X donde dijo que «la política de mayorías populares no es para sectas, ni se hace con purgas» y que la UCR no es una agrupación universitaria, sino un partido nacional.
«Esta decisión está mal. Le pido a las autoridades del partido que asuman la tarea de conducir, no que sean la voz de una facción», cuestionó el mandatario provincial», sentenció el gobernador mendocino.