Este domingo 11 de agosto, Gustavo Cerati cumpliría 65 años. Para celebrarlo, hay dos grandes convocatoria para que los fans se junten y recuerden con música a su ídolo.
Por un lado, se realizará Zoom 2024 – el 2° Encuentro Sodero Ceratiano este domingo en el Planetario, un lugar emblemático en la historia de Soda Stereo desde que filmaron el video del tema Zoom. Se anuncia en redes como «un picnic con guitarreada» y anticipan que habrá exposición de material inédito y sorteos de regalos cada hora.
Será de 13 a 17 horas, con entrada libre y gratuita. Organiza sodastereorockhalloficial, la cuenta de Instagram que viene juntando firmas para que al grupo se lo incluya en el Rock and Roll Hall of Fame.
El flyer de la convocatoria al Planetario, llamado «Zoom 2024».Por otra parte, Mario Pergolini lanzó hace pocas semanas una iniciativa para juntar a mil músicos que toquen el hit De música ligera y marquen un récord. De paso, será un gran evento «viralizable» para su programa de streaming en Vórterix.
La cita será en la Costa de Vicente López (Raul Ricardo Alfonsin y Laprida) y los interesados se pueden anotar en www.cumplecerati.com. Para participar solamente hay que llenar un formulario, llevar un instrumento y una radio FM.
La celebración, denominada Once, tu cumpleaños: homenaje a Gustavo Cerati, comenzará a las 14 horas y contará con la participación de diversos DJs que pondrán música a la previa. Habrá diferentes actividades y al caer el sol tocarán al unísono el clásico tema de Soda Stereo. Se estima ue el momento cúlmine será a las 17 horas.
Mario Pergolini junto a Gustavo Cerati en una de sus tantas entrevistas radiales donde presentó sus nuevas canciones. Foto gentileza @flacostereoPergolini será el maestro de ceremonias y estará acompañado por las figuras de Vorterix, como el equipo de Paren la Mano y Dani Jimenez, columnista en Maldición, va a ser un día hermoso.
Anécdotas de Cerati
Los fans siempre notaron que había una especial afinidad entre Soda Stereo y Mario Pergolini, que presentó en exclusiva a la mayoría de los discos del trío y de la carrera solista de Gustavo Cerati en sus programas de radio.
Mario Pergolini en Vórterix, donde actualmente hace «Maldición, va a ser un día hermoso» de 8 a 11. Foto: Martín Bonetto.La razón no era solamente la cantidad de público que escuchaba Malas compañías y Cuál es, sino también una vieja amistad, tal como él mismo cuenta en una charla con Clarín.
«Para empezar -dice- lo conocí cuando yo estudiaba en El Salvador y él estaba en el último año, igual que Zeta y Alfredo Lois. Y mi relación con él empieza porque cuando están por sacar Nada personal y me entero que van a hacer una gira por Latinoamérica, así que le pedí al mánager que me llevaran para cubrir todo y contarlo en los medios. ¡Tenía 19 años y me pagué el pasaje en cuotas porque no tenía un mango!
-Lograste lo que querías: te fuiste de gira dos meses.
-Sí, era un montón. Por eso el mánager Alberto Ohanián me pidió que primero me conocieran mejor, «para ver si te vamos a soportar». Así que fui con ellos en una combi a varios shows en el Gran Buenos Aires, a lugares como Club Bomberos de San Isidro.
Mario Pergolini junto a Gustavo Cerati, Zeta y Charly Alberti, en plena gira de «Ruido blanco». Foto gentileza @flacostereo-De paso fuiste testigo de la «Sodamanía» en Latinoamérica.
-Sí. Me acuerdo que en los aviones el comandante decía «Voy a dar una vuelta por arriba del aeropuerto para que vean la cantidad de gente que está esperando». ¡En un hotel encontraron a una fan atorada en los ductos de ventilación para llegar a las habitaciones!
Fue mi momento Almost famous, como la película donde el periodista chiquito viaja con la banda. Salía mucho con ellos de noche. ¡Volví con 15 kilos menos y mi mamá se puso a llorar cuando me vio! Era una gira de rock en los años ’80 por Latinoamérica, un delirio. Después fui a otra gira con ellos, la del disco en vivo Ruido blanco.
-Ahí fue cuando, para no aburrirse, habían hecho un grupo de rap con el tecladista invitado, Daniel Sais.
-Sí. Estaba Zeta también. Era nuestro grupo de rap de vuelo, porque teníamos miedo a volar. La mejor relación fue con Charly, que me dejaba entrar a los primeros en sayos en la casa de sus padres. Y con Gustavo pegamos muy buena onda y charlábamos mucho. Una vez fuimos juntos a Pinamar, donde sus padres tenían una casa, y una noche entramos al estudio de Rock & Pop Beach a las cuatro de la mañana y empezamos a pasar música y hablar de todo al aire.
Mario Pergolini junto a Gustavo Cerati en el auditorio Promúsica durante la presentación de «Comfort y música para volar». Foto gentileza @flacostereo-Hasta estuviste de novio con una ex de Gustavo: Noelle Balfour.
-Claro, sí. Con ella vivimos juntos un tiempo. La conocí en fiestas de Gustavo; ella era la de No existes, porque estuvieron juntos en la época de Signos. Me acuerdo que hablé con él y me dijo, «Todo bien». ¡Para mí era una locura porque ella era modelo y tapa de. Playboy!
-¿Te acordás de algún cumpleaños de Gustavo al que fuiste?
-S. Un par de veces cumplió estando de gira. Y conocí las fiestas en el 4B. Toda esa época fui muy amigo, hasta Doble vida. Después me abrí. Me empieza a ir bien en la vida y empiezo a tener un nombre también un poco mayor. Nos volvimos a juntar cuando MTV reunió a Soda para un premio. Y Gustavo siempre me dio la primicia de todos los discos solistas, que los presenté yo en la radio, salvo Fuerza natural.
Mario Pergolini junto a Gustavo Cerati en la época de «Ahí vamos». Foto gentileza @flacostereo
Bonus track: ping-pong con Pergolini
-¿Cómo ves el panorama de los programas de streaming?
-Gozando de buena salud y empezó a tener volumen de dinero, algo que no tenía, lo cual eso también es bueno. Creo que hay un streaming de identidad argentina que me gusta. Hay de todo y va a haber de todo. Hay que ver en qué se ha convertido el streaming argentino, que tiene su sus matices y no es como el streaming español o mexicano, que siguen con esa cosa más contenida, casi twitch, de mirar a cámara. Humildemente o no, fui yo el que propuso de entrada poner buena luz y cámaras, con mejor producción. produzcamos.
Esto no es una burbuja. Es una una realidad de medios. Es realmente un programa radio que se está viendo, aunque para muchos es solo un programa de radio con cámara. ¿En serio hacés radio con cuatro cámaras de seguridad? ¡Eso no es un streaming, es otra cosa!
Mario Pergolini. Foto: Martin Bonetto-Muchos influencers se convirtieron en conductores o columnistas.
-Sí, entendiendo también que una parte va para eso, que el negocio se hace desde ellos ahora y no desde una radio que me contrata y me paga un gran sueldo. Casi todos pasaron por acá en Vórterix, que es un semillero porque la política es que no queremos que te quedes 15 años haciendo el mismo programa. Las cosas son mucho más dinámicas. No hay lugar donde no haya un técnico o un operador de Vórterix. Antes había pasado algo parecido con Cuatro Cabezas.
-¿La televisión abierta sirve para algo, que es que irse a ver.
-Uno a veces dice que se va a morir. Yo ahora digo que «sigue estando», porque esto que vemos es «estar viva»… Nadie recuerda lo que era antes, porque no es esta realidad. ¿Entonces qué hacemos, apagamos la televisión porque son todos viejos? No, eso tampoco tiene sentido. Ahora son programas de 3-4 puntos y ninguno marca agenda. La agenda la marcamos en otro lado, con posteos y todo eso. En el mundo la televisión está muriendo por plata, por falta de inventiva y por formatos caros.
-No hay ficciones y hay reality-shows.
-La gente tampoco quiere ficción como antes. Hoy una novela es es otra cosa y para un canal es tan caro que no tiene sentido hacerlo. En cambio los realities van a funcionar siempre y se van a multiplicar aún más cuando sea más fácil interconectar varias cámaras en las vidas de las personas.
Mario Pergolini hoy apuesta al desarrollo de la inteligencia artificial para optimizar costos. Foto: Martin Bonetto.-Hace 20 años eras una de las figuras de la televisión y ahora estás en otra cosa, mientras que los demás siguen queriendo recuperar lo que perdieron.
– A veces pienso que fui bastante afortunado, porque pude sobrevivir un par de generaciones. También es ver qué querés hacer cuando te quedás enganchado de lo anterior. No quiero repetir el éxito que no existe más. Después intenté no enamorarme del anterior Vorterix, que fue demasiado rápido, demasiado adelantado, y me comí hacer banco cuatro años.
El tiempo ya fue emparejado todo y acá estamos, pero en cualquier momento me van a empatar y voy a tener que ver otras cosas. Por eso hoy estamos súper bien con la inteligencia artificial en desarrollo, optimizando costos. El talento lo van a empezar a hacer otros.