Dow, una empresa estadounidense líder en la petroquímica, anunció este viernes 4 de octubre el cierre de la única fábrica de polioles y derivados (base del poliuretano) que había en el país, en Puerto General San Martín, departamento de San Lorenzo, Santa Fe, al norte de Rosario. Desde el lunes 30 de septiembre que sus máquinas se encontraban apagadas.
La medida implica el despido de 40 trabajadores, que ya fueron notificados de la decisión de acuerdo con las leyes laborales argentinas y obtendrán una indemnización. El Sindicato de Obreros y Empleados Petroquímicos Unidos (SOEPU) se movilizó esta mañana a las puertas de la fábrica.
«Esta decisión, definitiva, nada tiene que ver con el contexto actual de la Argentina ni de Santa Fe en particular. La unidad productiva de San Lorenzo estuvo operando a bajas tasas de utilización como resultado de la marcada y constante retracción de la demanda de poliuretanos en todo el mundo», explicó Dow en un comunicado de prensa.
En 2021, la firma ya había querido levantar sus operaciones de esa planta, pero luego se frenó por una decisión global, detallaron. En ese entonces, el Gobierno nacional había armado una «mesa de competitividad» para intentar resolver los problemas de la industria.
La empresa agregó que «durante el último año, la compañía también ha cesado operaciones en fábricas de este tipo», como en dos plantas de Estados Unidos, Alemania, Bélgica y China. La producción de polioles se hará en otras partes del mundo, como por ejemplo en Brasil.
«El respeto por las personas y la integridad son dos de los valores fundamentales de Dow, y es por ello que la empresa se encuentra acompañando a los empleados y a quienes se les pondrá a disposición un paquete de beneficios económicos y sociales para atravesar este momento», sostuvieron.
Dow sigue en Bahía Blanca
Fuentes de la empresa garantizaron que la medida no implica de ninguna manera una salida total de la Argentina, donde Dow está presente desde hace más de 65 años.
De hecho, su complejo productivo de fabricación de etileno y polietileno en Bahía Blanca es su operación más grande en América Latina, y allí hizo inversiones en proyectos de «crecimiento, confiabilidad, sostenibilidad y mejoras» de su negocio petroquímico.