Tras el salto de las cotizaciones al inicio de la semana, el mercado cambiario registró este martes una jornada con dólares a la baja, con correcciones entre 10 y 20 pesos para las distintas modalidades. El dólar mayorista cerró en 1260 pesos luego de alcanzar el lunes a 1280, mientras que la cotización del minorista del Banco Nación se ubicó entre 1230 y 1280, en sus puntas compradora y vendedora, con retroceso de 15 pesos respecto de la jornada anterior.
Alerededor del mediodía, los valores de los dólares bursátiles, el MEP y el contado con liquidación, llegaron a superar levemente los 1300 pesos, pero luego se acomodaron hacia precios inferiores a los de ayer cerrando en torno a los 1275 (el primero) y 1283 pesos (el CCL). El dólar blue, en tanto, descendió 10 pesos respecto de su techo de 1340 pesos alcanzado el lunes.
La caída de la divisa se explicó, en parte, por la intervención oficial en el mercado de futuros y en la curva de pesos, pero también por una decisión que impactó en el ánimo de los inversores: la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York suspendió por tiempo indeterminado la entrega del 51 por ciento de las acciones de YPF a los fondos buitre Burford Capital y Eton Park, que ganaron un juicio multimillonario contra la Argentina.
La baja se produjo en un contexto de marcada intervención del Banco Central, que subió las tasas de corto plazo en pesos luego del desarme de LEFIs de la semana pasada. “El BCRA vuelve a tomar pesos y paga 35 por ciento, el dólar mayorista baja 1 por ciento faltando 10 minutos para el cierre. Hasta ahora la forma en que quisieron desarmar las LEFIs parece no haber sido la mejor”, señalaron en el mercado.
La señal judicial fue bien recibida por el mercado accionario, que reaccionó con subas en Buenos Aires y en Wall Street. El índice S&P Merval avanzó 0,54 por ciento impulsado por Transener (+4,7 por ciento) y otras energéticas, mientras que en Nueva York los ADRs treparon hasta 6,4 por ciento con Telecom Argentina a la cabeza. También se destacaron Transportadora de Gas del Sur (+3,1 por ciento), Cresud (+2,9 por ciento), BBVA (+2,7 por cienho) e YPF, que ganó 1,5 por ciento tras la noticia judicial.
En el mercado norteamericano, los principales índices operaron mixtos. El Nasdaq subió 0,2 por ciento, mientras que el Dow Jones perdió 1,0 por ciento y el S&P 500 cayó 0,4 por ciento.
Por el lado de los bonos soberanos en dólares, también hubo una mejora tras tres ruedas negativas. El Global 2046 lideró las subas con un avance del 1,8 por ciento, aunque el Bonar 2041 retrocedió 0,4 por ciento. El riesgo país se ubicó en 717 puntos básicos, según datos del JP Morgan.
En cambio, las Letras del Tesoro Capitalizables en Pesos (Lecaps) sufrieron caídas de hasta 1,6 por ciento, afectadas por las operaciones del BCRA en el mercado secundario y la rueda REPO, donde fijó la tasa a un día en 36 por ciento. “Fue un día de colapso para la curva de tasa fija en pesos”, advirtió el economista Javier Giordano.
Por último, el Gobierno celebró el dato de inflación de junio publicado por el INDEC, que mostró una suba de precios del 1,6 por ciento mensual. El número fue menor al esperado por consultoras privadas, que proyectaban cerca del 2 por ciento, y fue tomado como un espaldarazo al programa económico oficial. En el primer semestre del año, la inflación acumuló un 15,1 por ciento, mientras que la interanual fue de 39,4 por ciento.
En el gobierno también siguieron de cerca las novedades en el caso YPF. En detalle, los jueces de la Corte de Apelación de Nueva York suspendieron por “tiempo indeterminado” la orden de entregar las acciones de YPF a los fondos buitre en el juicio por la expropiacion de las acciones de la petrolera.
Con esta decisión, se puso un freno a la embestida judicial que inició la jueza Loretta Preska contra el país, que incluía un ultimátum de 72 horas para hacer efectiva su orden de transferir las acciones de la compañía. Según indicaron fuentes vinculadas al caso, “en principio” la decisión de la Corte de Apelaciones es “por tiempo indeterminado” y hasta que un nuevo plazo sea fijado por un tribunal, que deberá será convocado especialmente en este caso. Pero al mismo tiempo, dejó de correr el ultimátum lanzado por Preska para entregar las acciones de YPF o, en caso contrario, dictar un desacato contra la Argentina.