Por el conflicto que mantiene desde hace más de un mes con el gremio, desde la láctea SanCor advirtieron que es «inminente» el cierre de la planta situada en San Guillermo, Santa Fe.
«Se está planteando cerrar la planta. Hace más de un mes que no se puede producir», le confiaron a Clarín.
El conflicto con la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra), gremio que representa a los trabajadores lácteos, comenzó el 18 de octubre por atraso de pago de sueldos. A partir de ahí, comenzaron a realizar asambleas de 4 a 6 horas por día, lo que frenó la producción en las 6 plantas que tiene la cooperativa láctea.
Desde SanCor explicaron que se les informó de un plan de pagos y que fue presentado en la cuarta audiencia ante el Ministerio de Trabajo que se realizó la semana pasada. Consistía, entre otros aspectos, en saldar lo adeudado junto con el salario de diciembre, es decir, el que se percibe en enero. Y abonar los sueldos de octubre y noviembre, en tiempo y forma convenida, durante noviembre y diciembre, respectivamente. Pero el gremio lo rechazó.
Desde SanCor aseguraron que este conflicto con el sindicato comenzó con la caída del fideicomiso, que impulsaba el mismo gremio, ya que desde la cooperativa no quisieron ser parte.
La planta de San Guillermo es una de las seis que tiene la cooperativa. Fue reactivada hace 4 años a partir de un convenio con la firma Aristeo. El acuerdo era que Aristeo aporte leche cruda y la cooperativa era la responsable del proceso de elaboración.
En un principio, la planta se inició con 30.000 litros de leche diarios con 14 empleados. Luego, fue creciendo y llegó a procesar 70.000 litros por día, con un total de 26 empleados. Allí, la capacidad de producción es de 180 toneladas mensuales y se dedica específicamente a la elaboración de quesos blandos.
Justamente, fue esta misma planta que tuvo que tirar 100.000 litros de leche hace un mes atrás por el bloqueo que mantuvo el gremio.
Además, en las otras plantas no pueden lograr los objetivos de producción y ya hay desabastecimiento de productos, inclusive de los más sensibles, como son las leches infantiles, donde la marca es líder en el segmento.