El Gobierno nombró este viernes a un funcionario para que cobre el sueldo de dos meses en los que trabajó sin designación oficial. Y también, en el mismo decreto, lo echó y designó a su reemplazante, que venía trabajando en su puesto desde hace casi un mes.
Los protagonistas de la historia son Héctor Sergio Falzone, exsubsecretario de Energía Eléctrica entre el 8 de enero y el 20 de marzo, y su sucesor, Damián Eduardo Sanfilippo, a partir del 21 de marzo.
Mediante el Decreto 332/2024, publicado este viernes 19 de abril en el Boletín Oficial, se materializó esta situación. La norma está firmada por el presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en ausencia del ministro de Economía, Luis Caputo -de viaje en Estados Unidos-. Y blanquea lo que venía pasando en la segunda línea de la Secretaría de Energía, que está a cargo de Eduardo Rodríguez Chirillo.
El portal La Política Online atribuyó en marzo este enroque a una interna entre Rodríguez Chirillo, por un lado, y Caputo y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, que se habría saldado en favor de estos últimos.
Falzone fue ejecutivo de Central Puerto y el grupo Sociedad Argentina de Energía (SADESA), en donde tenía acciones Nicolás Caputo -que luego vendió- junto a otros socios. En el inicio del gobierno de Milei, Falzone tuvo a cargo el diseño e implementación de la incipiente reforma del sector eléctrico que propone el secretario de Energía, inspirado en las experiencias de Argentina en la década del 90 y en sus pasos por España y México.
Durante el primer trimestre, el Estado nacional acumuló una deuda con las generadoras de energía eléctrica por más de 900 millones de dólares al no pagar los subsidios para tener superávit fiscal.
Por su lado, Sanfilippo, que se venía desempeñando como el subsecretario en funciones aún sin designación oficial, es un ex ejecutivo de la distribuidora eléctrica de la provincia de Buenos Aires Eden, perteneciente al grupo Desarrolladora Energética (DESA), del empresario Rogelio Pagano.
Entre sus principales tareas está completar la liberación del mercado eléctrico, que deberá sacar a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) de su función de intermediario financiero y administrativo del sistema para que las generadoras vendan directamente la energía a las distribuidoras, en un esquema en el que los precios y las tarifas estarían «normalizados», con poca incidencia de los subsidios.
De manera más urgente, Sanfilippo deberá aprobar o revisar los precios estacionales de la energía que el Gobierno calculó para el semestre mayo-octubre y que podría derivar en otro fuerte aumento de las tarifas en los próximos 15 días.
NE
