Los presentes pueden tener continuidad con el pasado o añoranza. En el de Colón, a horas de jugar un partido que determinará en qué categoría competirá en 2024, no se reflejan los dos hitos encerrados en los últimos cuatro años.
Es posible ir al calendario con cadencia musical y recordar el Sabalé – Sabalé de Los Palmeras para recordar que en 2019 la Copa Sudamericana lo tuvo como finalista. Si bien cayó ante Independiente del Valle y se fue con la música a otra parte, dos años después festejó su primer título: campeón de la Copa de la Liga Profesional 2021.
Foto: Telam¿Qué pasó en el medio? En principio entrenadores. Desde Pablo Lavallén, quien condujo al equipo a la final de la Sudamericana a Israel Damonte, quien se jugará la permanencia, hay -entre interinos y contratados-, nueve directores técnicos. Tal vez, 11 conductores en apenas cuatro años puedan explicar por qué es posible la curva descendente que lo tiene mano a mano con Gimnasia y Esgrima La Plata este viernes.
Desde su regreso a la Primera División sobre el filo de 2014, la actual es una de las peores tres campañas y la que más amenazado lo tiene. La tabla que lo condenó fue la acumulada de 2023. Ganó apenas 10 de los 41 partidos disputados y sus 15 empates le otorgaron una baja efectivadad de puntos cosechados: solo el 36,59 por ciento de los que disputó.
Se medirá con el Lobo por su mala performance en la temporada, ya que el promedio de las últimas tres no lo tenía comprometido. Eso sí, si zafa ante Gimnasia tendrá que hacer una de las mejores campañas en 2024, porque su coeficiente lo manda al fondo: sin contar a los ascendidos -por el momento solamente Independiente Rivadavia de Mendoza, resta saber si el segundo será Deportivo Maipú o Riestra-, será el peor con 1.097.
Es que perderá los 64 puntos de la temporada que se coronó en la Copa local ante Racing con una victoria por 3 a 0 y tendrá que hacer bastante más que los 45 de las últimas de 2023 y 2022. Pero para que ese dilema sea posible, primero deberá ganarle a Gimnasia en la cancha de Newell’s.
Marcelo Saralegui, DT de ColónNingún técnico le encontró la vuelta al Sabalero esta temporada. Marcelo Saralegui, que había sido confirmado tras el interinato del año anterior, firmó un contrato con vigencia hasta el 31 de diciembre dirigió apenas cuatro fechas y salió eyectado. Néstor Gorosito, tampoco. La salvación que suponía Israel Damonte tiene el final abierto.
Foto MARCELO CARROLL – ClarínA diferencia del derrotero que lo llevó a las finales de la Copa Sudamericana y de la Liga Profesional, esta versión cabizbaja de Colón tiene un claro problema cuando sale de su casa: pierde. A excepción de la primera fecha de la Zona A cuando le ganó a Independiente en Avellaneda, el Sabalero perdió en todas sus presentaciones como visitante.
Huracán, Instituto, Barracas, Arsenal, Banfield y Vélez se quedaron con los tres puntos cuando recibieron a Colón en la fase clasificatoria de la Copa que el fin de semana jugará los cuartos de final. Administrativamente, en Rosario el Sabalero será local.
Usará el vestuario de Newell’s y los colores del Marcelo Bielsa le recordarán a casa y así, tal vez, se sienta en su hábitat: en el Brigadier López ganó todos, excepto los de Unión y River, que fueron empate. Esa cuestión, al parecer, es la única “ventaja” de la que el equipo santafecino puede jactarse.
Para que vuelvan a sonar Los Palmeras, el Sabalero deberá cantar victoria. En un partido a todo o nada, en el que «todo» implica quedarse en la máxima categoría y «nada» significa el descenso, el equipo de Israel Damonte tiene que lograr en un partido, la contundencia que no tuvo en la temporada.