El ministro de Economía, Luis Caputo, llegará este miércoles a Washington para participar de la Asamblea de Primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, reunirse con autoridades del Tesoro y del BID y brindar una conferencia organizada por el JPMorgan. A último momento se sumó al viaje el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, que también incluyó en su agenda reuniones con funcionarios de Casa Blanca.
Además de Caputo, la delegación económica incluirá al secretario de Finanzas Pablo Quirno y el jefe del Banco Central, Santiago Bausili, quienes mantendrán varias reuniones en el marco de la Asamblea del organismo y también del G20. No está confirmado aún un encuentro oficial de los argentinos con la directora Kristalina Georgieva o la vice, Gita Gopinath, pero seguramente se verán en las reuniones del edificio de la calle Pennsylvania.
Los funcionarios de economía aprovecharán el viaje para afilar la octava revisión del programa, que debería concretarse a mediados de mayo y que permitiría un desembolso de unos US$770 millones. Pero también el Gobierno se entusiasma con un nuevo programa que amplíe el préstamo a la Argentina, con unos US$15.000 millones que serían utilizados fundamentalmente poder salir del cepo. Sin embargo, la vocera Julie Kozack dijo semanas atrás que era «prematuro» hablar sobre ese tema.
En Economía están exultantes porque en la revisión no pedirán waivers o perdones y que esto “hacía décadas que no sucedía”, según dijeron a Clarín, y confían en que las metas que establece el programa en cuanto a reservas y a déficit fiscal están más que cumplidas, en forma “espectacular”, señalan. También celebran la desaceleración de precios que, según estimó el FMI, cerrará este año en un 150% de inflación y 45% en 2025.
El martes por la mañana, el Economista jefe del FMI, Pierre Olivier Gourinchas, dijo que el plan de Javier Milei “ya está mostrando los efectos”. “Estamos viendo un fuerte declive en la inflación mensual. El progreso ha sido muy impresionante, también se ha registrado un superávit fiscal por primera vez en una década. Pero por supuesto va a tomar más tiempo. Se necesita una implementación de políticas firme y hay aún más por hacer».
Las negociaciones entre los técnicos continúan en forma virtual o presencial. Hace pocas semanas estuvo en Buenos Aires el director para el Hemisferio Occidental del organismo, Rodrigo Valdés, quien advirtió que más allá de cumplir con las metas «es importante seguir mejorando la calidad del ajuste fiscal, no la cantidad», a la vez que remarcó que el impacto de estas medidas no debe caer en forma desproporcionada sobre los sectores más vulnerables, un mensaje constante del Fondo.
Caputo se verá también con el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ilan Goldfajn, quien también estuvo reunido con el presidente Milei la semana pasada en Miami. Y dará este miércoles una conferencia en una jornada organizada por el JPMorgan, donde trabajó entre 1994 y 1998.
Uno de los puntos clave de la gira será el encuentro que Caputo y Posse mantendrán en el Tesoro, donde todo indica que se entrevistarán con Jay Shambaugh, la mano derecha de Janet Yellen, que estuvo en Buenos Aires en diciembre y sigue de cerca el caso argentino. Durante la gestión de Sergio Massa, este funcionario había sugerido que se le “soltara la mano” a la Argentina porque no cumplía con los acuerdos, pero ahora ve con buenos ojos los planes de Milei.
Washington sigue de cerca la evolución de plan económico argentino. El rol del Tesoro es fundamental para cualquier negociación o nuevo programa con el Fondo, ya que Estados Unidos es el principal accionista del organismo y su voto tiene más peso que cualquier otro país en el directorio ejecutivo.
Posse también aprovechará para mantener reuniones en la Casa Blanca con el nuevo asesor de Seguridad para América latina, Dan Erikson, que reemplazó días atrás a Juan González. También se reunirá con la Asesora Adjunta de Seguridad Nacional para Ciber-tecnologia y Tecnología Emergente, Anne Neuberger.
