Cecilia Strzyzowski (28) entra a la casa de la familia Sena acompañada por su pareja, César (18). Son las 9:14 de la mañana del 2 de junio, es feriado en todo el país y los jóvenes están por irse a vivir a Ushuaia según cree ella. No es una situación normal.
Cecilia tenía una relación tirante con sus suegros, Emerenciano y Marcela Acuña, los dos referentes piqueteros más influyentes de la política de Chaco. Es infrecuente que esté ahí adentro en un terreno visitante, casi hostil. Acuña había operado para anular el matrimonio civil que su único hijo y «esa chica» (como la llamaba), habían firmado meses atrás. Legalmente casados estuvieron apenas un par de días. Esa interferencia había disparado el viaje a Ushuaia. O eso creía ella.
Cecilia, 165 cm según la descripción que dará unos días después su madre ante la policía, entró al domicilio de los Sena según registran las cámaras de video que apuntan a la puerta. De allí no se la ve volver a salir. Lo que siguió fue una averiguación de paradero que derivó en una causa por presunto femicidio que sacudió los cimientos de la sociedad y la política chaqueña. «Donde está Cecilia», el pasacalles que se volvió bandera, es la pregunta que aún no tiene respuesta.
A seis meses de la desaparición, la última esperanza podría estar en un nuevo hueso hallado hace unas semanas semanas. Se trata de lo que sería una costilla humana, de apenas 4,5 cm, que fue encontrada en el lugar donde los fiscales entienden que se quemó el cuerpo de la joven luego de asesinarla en el domicilio de los Sena. Es el tamaño de dos almendras una al lado de la otra.
Estos restos fueron hallados junto a otros 12 huesos en el Campo Rossi, perteneciente a los Sena, en un allanamiento ocurrido el pasado 25 de octubre, luego de una recomendación de un arqueólogo que aconsejó seguir revisando en el lugar donde hay rastros de una enorme quemazón.
César Sena y Cecilia Strzyzowski, cuando se casaron. El matrimonio duró legalmente apenas unos días.Los otros huesos, de menos de un centímetros, estaban «frágiles, incompletos», y presentaban «efectos de deterioro por fuego», según un informe del Instituto de Medicinas y Ciencias Forenses (IMCIF) del Chaco, al que tuvo acceso Clarín.
Pero el más grande llamó la atención. Para los peritos Eduardo Reinaldo Schelover (patólogo forense),Sergio Fabián Moro (bioquímico), Gustavo Germán Lisboa (forensee) y Raúl Alejandro Aguirre (odontólogo forense), serían compatibles con una costilla humana fragmentada.
Según confirmaron distintas fuentes forenses a Clarín, el mismo será revisado por el Instituto de Medicina Forense de Córdoba en los próximos días. Si consideran que puede ser humano y no está lo suficiente carbonizado, se lo derivarán al Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), para que intente hacer una extracción de ADN y cotejarla con el perfil genético de la madre y la hermana de Cecilia.
Una posible confirmación del hallazgo de un cuerpo. Clave para la causa, pero sensible para hacer el duelo familiar de un caso que estuvo en el ojo público.
El EAAF, al que se convoca para los casos más complejos, trabaja regularmente en el hallazgo de los nietos desaparecidos en la última dictadura militar o llevó adelante la identificación de soldados enterrados en Malvinas.
Hace unos meses habían intentado extraer ADN de una tanda de 12 huesos humanos hallados en el Río Tragadero, que se cree que podrían ser de Cecilia. Sin embargo, por el avanzado estado de carbonización fue imposible encontrar un rastro para correr la identificación.
Un plan «orquestado» vs «no hay cuerpo»
Marcela Acuña, Emerenciano Sena y César Sena. La falta de un cuerpo es uno de los puntos centrales en la estrategia de la defensa de los Sena,que insisten en que los fiscales no tienen probado que ninguno de los miembros de la familia haya matado a la joven. Incluso plantearon en varias entrevistas que consideran que la chica está «desaparecida«. Mencionan que no la ven salir las cámaras y que podría haber salido por puertas laterales.
El equipo, liderado por el abogado Ricardo Osuna, coordina las defensas de los tres Sena. Afirman que en todo el expediente no hay una sola prueba que incrimine a Emerenciano ni a Marcela Acuña, su esposa, en un plan premeditado para matar a Cecilia. De hecho, señalan que Emerenciano casi no aparece nombrado.
Es por eso que plantean pedidos de revinculación para los tres Sena detenidos, que desde el crimen no volvieron a verse cara a cara. La fiscalía cree que se envían mensajes cifrados a través de los colaboradores.
El otro pedido de la defensa es que se otorgue a Emerenciano la prisión domiciliaria, basado en un cáncer de colon que lo hizo perder «más de 20 kilos en el último tiempo», según afirman desde la defensa a Clarín. Es por eso que el líder piquetero pidió declarar ante los fiscales la semana pasada, para hablar de su situación de salud. Del caso Cecilia no aportó datos nuevos.
«Emerenciano afirma que se tergiversó el informe médico que le hicieron», cuenta uno de los abogados, en referencia a una pericia del IMCIF.
Otro detalle que menciona la defensa es que en los mensajes posteriores a la presunta desaparición, Acuña intentará evitar que su marido se entere de que «algo ocurrió» en el domicilio familiar. Se contacta con uno de los colaboradores y largan un operativo para sacar de la casa «un bulto» que la mujer vio en uno de los cuartos.
Del otro lado creen que esos mensajes se trataron de una pantalla para desviar la investigación en caso de que fueran detenidos. Es la teoría del Equipo Fiscal Especial (EFE), conformado por los fiscales Jorge Cáceres Olivera, Nelia Velázquez y ahora por Juan Martín Bogado. Este último fue designado esta semana en reemplazo de Jorge «Pato» Gómez, que fue convocado por el ahora gobernador Leandro Zdero para que se haga cargo del Ministerio de Justicia y Gobierno.
Aún sin el cuerpo, los fiscales están confiados en las pruebas que tienen: registros telefónicos, búsquedas en Google, celulares que se quemaron, localización de antenas telefónicas de los aparatos de todos los implicados, el testimonio de uno de los acusados de encubrimiento (Gustavo Obregón) que señaló el lugar donde fueron hallados los restos humanos calcinados, en el río Tragadero. Allí también se encontró un dije, que la madre de Cecilia reconoció como de su hija y que aparece en varias fotos.
Según confirmaron fuentes con acceso al expediente, el pedido de elevación a juicio oral está casi listo. Y ese casi responde a este nuevo hallazgo de la costilla, que podría sumar una prueba más. Aun así, sienten que tienen material suficiente para construir el caso.
Hay otro informe del Instituto de Medicina Forense de Córdoba que para los fiscales es relevante. Se trata de un análisis realizado de los huesos calcinados que fueron hallados en Campo Rossi. Si bien no se pudo sacar ADN, los mismos aportaron otros datos.
Según relata la antropóloga responsable del estudio, para alcanzar el color «blanquecino» que tienen los restos, deben haber estado a «más de 800 grados» al menos entre 12 y 14 horas de fuego constante alimentado con leños ‘unduray’, propios de la región. Esto eliminó todo tipo de posibilidad de analizarlos y la hipótesis de que fueron quemados apenas unas tres horas. Demandó más recursos.
Emerenciano Sena, Marcela Acuña, y su hijo César. Los tres están detenidos y nunca volvieron a verse las caras desde entonces. La complejidad del presunto plan para desaparecer el cuerpo de Cecilia es otro punto que orienta al equipo de fiscales en que se trató de un crimen planificado. Eso sostiene, en su visión, que hubo coautoría tanto de Emerenciano como de Acuña en la planificación y ejecución del crimen. Con todos estos elementos, el Equipo Fiscal Especial cree que tiene elementos suficientes para acreditar su hipótesis del caso y elevar todo a juicio.
Si bien se especuló hace unas semanas con que se podría enviar el pedido antes de la feria judicial, el mismo no saldría hasta el año que viene. Como la defensa apelará el pedido, el juicio no tendría lugar hasta el segundo semestre del año. Estiman que durará unas dos semanas.
Por norma de la justicia chaqueña, el juicio por el presunto femicidio de Cecilia Strzyzowski será con jurado popular, una detalle que agrega una capa de complejidad al caso: ¿quién no está al tanto del caso en la provincia y quién podría ser objetivo en una causa que causó una sensibilidad enorme? Por eso se espera que el sorteo sea minuciosamente revisado por las partes para definir a los nombres que dictarán la suerte de los Sena.
Los otros cuatro acusados, señalados por encubrimiento, podrían pedir un juicio abreviado en 2024. Se trata de Obregón y su ex pareja, Fabiana González, y los caseros Gustavo Melgarejo y Griselda Reynoso.
PJB