«Papas fritas no hay», bromeó un diputado libertario sobre el menú que este martes a la noche Javier Milei ofrecío en la quinta de Olivos a la mayor parte de los «87 héroes» que apoyaron el veto presidencial a la ley de movilidad jubilatoria en aras del «equilibrio fiscal». Se refería a un plato que el propio jefe de Estado reconoció tiene «alergia» y lógicamente no formó parte del frugal menú que se degustó en el quincho de Olivos, por el que los comensales debieron pagar $20 mil.
El Presidente y su hermana Karina oficiaron de anfitriones de un grupo compuesto por diputados de la LLA, el MID, el PRO, partidos provinciales y hasta un radical, que se sumaron a su embestida contra una normativa que, a su entender, ponía en riesgo el déficit cero.
La mayoría de los invitados ingresaron por la entrada de Maipú. A pocos metros, un grupo de jubilados realizaron una protesta e hicieron sentir el batir de sus cacerolas en rechazo a un encuentro al que consideraron una provocación.
El diputado Damián Arabia, del ala de Patricia Bullrich, quien también estuvo presente, arribó a la reunión con una ensalada de papa y huevo porque le pareció «descortés caer con las manos vacías». También estuvieron presentes el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán y el vocero presidencial, Manuel Adorni. Todos degustaron ensaladas y algunos cortes cárnicos, con agua, gaseosa y una copa de vino; de postre, se sirvió una mousse. Ninguno de los asistentes pudo usar su celular durante la tertulia para evitar fotos indiscretas.
Milei recibe a Diputados en Olivos. Protesta frente la quinta de Jubilados sobre av Maipu y Villate . foto MARCELO CARROLLDesde temprano la mirada estaba puesta en qué haría el grupo de cinco radicales que luego de fotografiarse con el Presidente en Casa Rosada, fueron clave en la votación final apoyando al oficialismo.
Sólo estuvo presente el tucumano Mariano Campero y en cambio se ausentaron Luis Picat, que se encontraba en Córdoba, Michel Tournier, que no es afiliado radical pero integra el bloque por haber asumido en una alianza con el gobernador correntino Gustavo Valdés, Pablo Cervi y Martín Arjol.
Cada comensal tuvo que hacerse cargo de su plato. El dinero debería ir a las arcas de la Secretaría General de la Presidencia deslizaron en Balcarce 50. Es lo mismo que conjeturó el chef Dante Liporace, que durante la gestión de Cambiemos estuvo a cargo de la cocina de la Casa Rosada, y este martes posteó en su cuenta de X que tanto en Olivos como en Casa de Gobierno lo habían implementado «durante el gobierno de Macri, el tema es que nadie dijo nada cuando durante 4 años los K volvieron a dar todo el ´morfi´ gratis, que hermoso saber que tienen que volver a pagar lo que consumen».
Al respecto, el empresario dijo a Clarín que en Balcarce 50 había empleados de tesorería del comedor que pasaban a cobrar una vez por semana a los funcionarios y que la misma mecánica se replicaba en la quinta presidencial y que «al final del mandato se incorporó el posnet» para evitar el pago en efectivo.
Más temprano la inusual tertulia en la quinta presidencial provocó un tenso cruce en el plenario de las comisiones de Peticiones y de Asuntos Penales de la Cámara baja, entre la titular del cuerpo, Silvia Lospennato (PRO) y su par de Unión por la Patria, Agustina Propato.
Ante las chicanas de esta última, la diputada macrista le espetó «vos con quién vas a cenar hoy, tal vez tenés ganas de contarnos. Tengo todo el derecho a cenar con quien quiero en mi vida, así que no tengo por qué contarte a vos a qué hora voy a cenar”.