Javier Milei recogió el guante que le tendió Mauricio Macri para que el Presidente se ponga al frente de la conducción política del oficialismo y sus aliados. Con ese horizonte el mandatario libertario inaugura una «mesa legislativa» con jefes de los bloques aliados en Diputados. La discusión, en cualquier caso, se concentrará en el primer caso en lo previsional.
En La Libertad Avanza sostienen que la convocatoria en realidad fue su idea y que uno de los ejes principales de la conversación vespertina será asegurar que la oposición no vuelva a conseguir los dos tercios en el Congreso (en Diputados quedó a un paso) para que no pueda insistir con la ley de movilidad jubilatoria que el Presidente se prepara para vetar de manera total.
Pasadas las 18.30 se reúnen con el jefe de Estado en la Casa Rosada una decena de diputados, entre los que sobresalen el titular del bloque PRO Cristian Ritondo y Oscar Zago, ex presidente de bloque de LLA, hasta que fue reemplazado y creó su propia bancada.
Ritondo, alfil de Macri y con diálogo directo y almuerzos a solas con el Presidente, no estará solo: lo acompañarán también diputados cercanos a Patricia Bullrich, como Silvana Giudici. La interna entre el ex presidente y la ministra de Seguridad volvió a levantar voltaje después de rechazo al DNU que otorgaba $100 mil millones a la SIDE y el voto afirmativo de los senadores del PRO a la ley de movilidad jubilatoria. Además serían de la partida Luciano Laspina y, si llegaba a tiempo desde Paraná, María Eugenia Vidal.
«Es una reunión técnica, no política», dicen en el bullrichismo. Los diputados del PRO ya habían votado en contra de la movilidad jubilatoria, pero ahora necesitan garantizar que estarán presentes para que la oposición dura no consiga los dos tercios necesarios para voltear el veto. «Es muy importante la disciplina. Es una espada de Damocles sobre las cuentas públicas», señaló uno de los convidados a la Rosada.
Los diputados del partido amarillo señalaron que antes de cualquier definición de respaldo cerrado al veto total lo debatirán con el resto de la bancada y con Macri, que ya adelantó su acuerdo. .
La flamante ley de movilidad que el Presidente vetará no es el único fantasma que se posa sobre el delicado plan económico del gobierno para sostener el superávit. En el PRO recuerdan que con una mayoría simple, el Congreso puede dar de baja el aumento por IPC y restablecer la fórmula vigente durante la administración anterior, a la que definen como «una bomba en períodos de desinflación». «Es una amenaza demasiado grande como para que esté pendiendo de un hilo de un acuerdo entre el kirchnerismo y los opositores dialoguistas”, razonan.
El jefe del bloque oficialista Gabriel Bornoroni también llegará acompañado por José Luis Espert y otros legisladores de su convulsionado espacio, que hace 48 horas perdió a Lourdes Arrieta por las denuncias cruzadas alrededor de las visitas de legisladores a represores.
El presidente de la Cámara Martín Menem, criticado por propios y extraños, no será de la partida. En el entorno del diputado riojano y alfil de Karina Milei adujeron que se encontraba de viaje. En la víspera, Macri aludió a su falta de conducción. «Hay que saber conducir Diputados«, dijo el ex mandatario durante el acto de la Fundación Pensar en Entre Ríos. Bullrich le contestó este viernes al ex mandatario con un tiro por elevación. «Vas a ayudar o no, vas a mirar la manchita del melón en vez de tirar del carro», dijo sin que hiciera falta que aclarara a quién se refería.
Zago, con pasado en el PRO y fugaz titular del bloque de LLA, iría solo. «Mi bloque confía en mí», se diferenció. El jefe del MID explora un acuerdo con el PRO para crear un interbloque, pero ve lejos la posibilidad de un acuerdo con el oficialismo. «Desde el 10 de diciembre estamos trabajando en esa dirección. Y lo seguí trabajando (después de dejar LLA). Ahora estamos más cerca de lograr un acuerdo con el PRO. LLA nunca se prestó a esto”, dijo el diputado a Clarín.
En la Casa Rosada relativizan la posibilidad de consumar un interbloque con sus principales aliados en el corto plazo, aunque no lo descartan de cara a un acuerdo electoral en 2025 que también incluya a sectores de la UCR.
El jefe de Gabinete Guillermo Francos, a quien dentro del oficialismo varios lo responsabilizan por los últimos fracasos en el Congreso, finalmente sí estará presente en la reunión.
El antecedente más inmediato a la mesa legislativa que este viernes encabezaría el Presidente fue la visita de una comitiva de diputados del PRO el 9 de mayo a la Rosada para reunirse con Karina Milei. El encuentro hasta ahora, no había vuelto a repetirse, a pesar de que los diputados del partido amarillo habían adelantado que no acompañarían proyectos que pusieran en jaque el superávit fiscal. Es el argumento que por estas horas repite el Presidente. «La idea es que la mesa legislativa se sostenga en el tiempo», se entusiasmaban en la mañana del viernes en la bancada del macrismo.
El Presidente, al menos por este viernes, corrió de la cabecera a su hermana, «el jefe», para ponerse al frente de la discusión política, aunque todos los interlocutores del mandatario advierten como él en la intimidad, que la rosca lo aburre y solo le interesan los resultados económicos.
