22 C
Resistencia
5 noviembre, 2024

El Barça pierde el Gamper 12 años después

Muy útil resultó el Gamper para Hansi Flick. Vio lo lejos que está su equipo del Barcelona que se espera a cinco días de empezar la competición. Alguien le explicará los pormenores del Valencia y las características que encierra la visita a Mestalla. Poco o nada que ver con el amistoso veraniego, desangelado en la grada, con una ola en el minuto 30 y sin cánticos continuados, pese a que Montjuïc abrió sus puertas con una magnífica asistencia: 41.416 personas.

Fue útil para evitar falsas y desmesuradas expectativas. Las que pudiera haber saltaron por los aires con la derrota y la pérdida del trofeo por primera vez en 12 años. Desde la derrota con la Sampdoria (1-0). Hubo pitos con el 0-2, se dudó de que fuera por el presunto fuera de juego de Embolo; los del 0-3 fueron concluyentes del disgusto general.

Lamine Yamal, el reactivo

Faltaban muchos jugadores en el imaginario once titular, pero la alineación ante el Mónaco no será muy distinta de la que peleará por los primeros tres puntos. Lamine Yamal y Gündogan, suplentes en el inicio, son los únicos elementos diferenciales que pueden cambiar la cara al equipo azulgrana. Fermín está de vacaciones y ni siquiera estaba en el estadio; Pau Cubarsí y Eric García aparecieron para lucir sus medallas de oro y ser homenajeados con otros medallistas olímpicos, pero solo se vistieron de corto para la presentación, y son defensas. Gavi, Pedri, De Jong y Ansu Fati están lesionados. Ninguno es recuperable para Flick el sábado.

Lamine Yamal, en efecto, cambió la cara del equipo. Salió con el 0-2 y en tres minutos despertó a la grada y revolucionó el choque con un envío a Pau Víctor que rozó el gol y poco después chutó él al marco. Generó entusiasmo y juego, lo poco que pudo aplaudirse en Montjuïc.

El mismo Barça

El culé fuel al Trofeo Joan Gamper vio al mismo Barça del año pasado aunque sólo repetían cinco jugadores en el once inicial. El largo verano no ha generado cambio sustanciales respecto al de Xavi. Solo ha habido dos fichajes, ninguno de ellos para cubrir un déficit concreto. Jugó Pau Víctor pero no el recién llegado Dani Olmo, ausente en el acta como los olímpicos.

El equipo jugó con el 4-2-3-1 en el que se refugió Xavi, con algunas salvedades ya observadas con Flick: los extremos juegan en su lado natural (el diestro Víctor en la derecha, el zurdo Raphinha en la izquierda) y se observó un mayor espíritu e implicación defensiva, implicado Pablo Torre ante la oportunidad de ganarse su permanencia en el equipo, activo Balde al que le cuesta mirar su retaguardia. Ocho jugadores llegaban a acumularse en el área, virtud y defecto a la vez porque supone un repliegue muy exagerado que condiciona las siguientes acciones, siempre que no sean sacar de centro por haber encajado un gol.

Pau Victor mandó a la grada un balón a puerta vacía a los 43 segundos y luego tuvo otra ocasión que salió fuera. Fue elegido el mejor del partido

Tuvo Pau Victor un balón a portería vacía a los 43 segundos y mandó el balón a la grada. Sucedió, pero fue engañoso. El delantero no es tan malo (ha sido el máximo goleador de la pretemporada y fue elegido el mejor del partido) y el equipo azulgrana no volvió a crear otra ocasión de gol. Fue mucho más incisivo el Mónaco, mejor preparado y afinado para recibir al Saint Etienne el sábado en la Ligue 1, que en la segunda mitad acertó en sus aproximaciones al área. Tan frecuentes y certeras que recordaron al Barça del pasado y ante el que la hinchada expresó su fastidio.  

Últimas Noticias
NOTICIAS RELACIONADAS