Cuenta atrás por un lado, recuento de sensaciones y resultados por el otro. En esa doble tarea anda el Córdoba CF de Iván Ania una vez saldada su pretemporada con vistas al reestreno en Segunda División media década después, cerrada tras otra media decena de compromisos amistosos y una amalgama de conceptos, apuntes y ajustes sobre los que tomar nota en esta intensa pero ilusionante recta final antes de volver a vestirse de corto, aunque ya en plena competición oficial: el próximo viernes 16 de agosto ante el Mirandés en el Municipal de Anduva (19.00 horas). Con vistas a procurarse un arranque adecuado, al bloque blanquiverde le quedan tan solo unas pocas fechas de autoevaluación y otras tantas de conclusión, casi más importantes. ¿Cuáles han sido las diez claves de la preparación cordobesista?
El balance en números
Una vez concluida la fase de preparativos estivales previa a la puesta de largo en el circuito doméstico, el balance para los de blanquiverde es significativo: dos empates, dos victorias -ambas en tanda desde los once metros- y una derrota, dolorosa. En ese lapso, el Córdoba CF también se ha medido a rivales de toda complejidad y pelaje, desde clubes de Primera División, adversarios de plata en la campaña que se avecina, así como otro par de oponentes de inferior categoría. Ante casi todos, el resultado ha sido parejo, exhibiendo una versión sólida, resolutiva en mediocampo y en el sector defensivo, aunque menos prolífica de tres cuartos hacia adelante, donde el juego, por momentos, se ha estancado. Diferente, eso sí, fue la estampa frente al Málaga, único equipo que ha conseguido desarbolar la ecuación de los de El Arcángel hasta el momento, incluso rondando la goleada.
A buen seguro, esos serán algunos de los muchos aspectos a potenciar o mantener en la propuesta del nuevo cuadro califa, que se encuentra a menos de una semana de volver a tener puntos en juego, con una carta de presentación sigular después de haber saldado con tablas sus pulsos ante el Cádiz y el Atlético Sanluqueño, ambos sin goles; superado desde los once metros al Rayo Vallecano (1-1) y el Recreativo de Huelva (0-0), aunque hincado la rodilla con los boquerones (2-0).
Lo mejor
Entre los elementos más positivos se encuentra la unión del núcleo duro del Córdoba CF, que mantiene buena parte del vestuario que hace tan solo mes y medio se encontraba festejando el ascenso a la categoría de plata en Las Tendillas. Con añadidos, algunas salidas dolorosas, otras necesarias, además, la comisión deportiva ha potenciado las características del anterior vestuario con añadidos significativos -en forma de buena adaptación de los recién llegados-, manteniendo la filosofía y dejando el gran ambiente, la sintonía entre protagonistas, así como la calidad, entre los puntos más reseñables de un bloque armado para ilusionarse.
Lo peor
En la línea contraria, la faceta menos alentadora de la puesta a punto ha radicado en las lesiones -obviado el cierre de la agenda de amistosos-. Abrió la tanda de inquilinos en la enfermería José Calderón tras pequeñas molestias posteriores a la participación en el triangular en El Palmar ante el Cádiz y el Atlético Sanluqueño con motivo del Trofeo Sanlúcar Gastronómica. Pronto se recuperó el paradeño, aunque a última hora, justo antes de hacer las maletas rumbo al stage de Montecastillo, le tocó el turno a Kuki Zalazar, único futbolista de la primera plantilla que no ha podido viajar con el grupo, si bien dejó grandes sensaciones antes de aquejar molestias musculares. Guarda también paralelismos Álex López, del filial aunque habitual a la dinámica del primer equipo, también una de las perlas más prometedoras de la cantera, que tampoco ha podido sumarse a la expedición por problemas musculares.
Poco gol
Otro de los síntomas detectados a lo largo del verano para el renovado conjunto cordobés ha sido la falta de puntería, focalizada en la vertiente ofensiva, donde tan solo ha podido celebrarse una diana, correspondiente al cruce frente al Rayo Vallecano, equipo de Primera División, en la segunda entrega del Trofeo Puertas de Córdoba en El Arcángel, que acabó decidiéndose en penaltis. En lo demás, ninguna otra pieza ha conseguido abrir la lata, tampoco su casillero individual hasta la fecha, dejando el golazo de Jacobo González ante los madrileños como excepción entre ciertas dudas en punta, también a la espera del deseado tercer delantero centro en el mercado.
En busca del cerrojo
Por contra, otro de los factores más satisfactorios en el transcurso de la precampaña blanquiverde -salvando su última cita- ha radicado en la portería y retaguardia, donde tres tantos en contra han acabado en el sumario defensivo tras cinco amistosos. De ello se extraen ciertas conclusiones, como la relativa fiabilidad de la vieja guardia blanquiverde, comúnmente conformada por Martínez, Lapeña, Carlos Albarrán y José Calderón, junto a Matías Barboza, aunque menos solvencia a la hora de alinear a otros protagonistas, sin demasiado protagonismo ni incidencia por parte de Xavi Sintes ni Carlos Isaac. Bajo palos, no obstante, la disposición ha sido notable, con Carlos Marín y Ramón Vila habiendo rayado un alto nivel en sus actuaciones.
El más destacado
Entre lecturas principalmente positivas, una de las buenas nuevas en el novedoso plantel ha sido el aterrizaje de Jacobo González, también su gran acoplamiento. El atacante madrileño ha concluido la preparatoria como uno de los figurantes más destacados bajo las órdenes del técnico Iván Ania, con una anotación en su haber -de bella factura- y habiendo asimilado a la perfección su rol en mediapunta, buenamente también producido ante la ausencia de Zalazar, tras incorporarse al Córdoba CF en calidad de refuerzo -al menos en un inicio- para los costados, en los que su polivalencia, asimismo, promete competitividad.
De forma similar ha mostrado capacidad asociativa y gran golpeo el ex del Alcorcón, poniendo un argumento más sobre la mesa de la dirección técnica a la hora de valorar su estancia, o bien permanente o recurrente, en el territorio de los enganches, donde ha cuajado.
La incógnita
En las últimas fechas sembró la duda, eso sí, la ola de rumores despertados en torno a la continuidad de Antonio Casas como blanquiverde. Cuenta con el interés de diversos clubes de la Primera División del fútbol portugués el atacante rambleño, también con presumibles importantes cuantías de dinero como reclamo, siempre y cuando se produzca previo pago de la rescisión del contrato que todavía le une a El Arcángel hasta 2025, estimado en alrededor de 400.000 euros. Su hipotética desvinculación, en ese saco, supondría un duro revés para el esquema ribereño, que ha encontrado en el «20» a su ariete por excelencia durante las tres últimas campañas, entre las que suma dos ascensos y la friolera de 39 goles en campeonato liguero en 104 partidos.
Las apuestas
Por otro lado, grandes aspiraciones quedan diapositivas sobre una pieza en concreto dentro del total de hasta ocho fichajes formalizados por el momento: Théo Zidane. El mediocampista francés, procedente del Real Madrid Castilla, es la gran apuesta blanquiverde de cara a esta nueva etapa en Segunda División, también la primera del espigado creador tras su paso por la cantera merengue. Durante la pretemporada ya ha tenido tiempo para lucir algunas de sus armas, sacando partido a un gran despliegue físico, gran visión de juego -y fácil, que en ocasiones es incluso más importante- y potente golpeo. Su fichaje en propiedad ha sido toda una declaración de intenciones, tratando de hacer del galo un jugador franquicia del Córdoba CF del futuro.
En márgenes similares, aunque en orden y carácter distinto, el reciente desembarco de Ander Yoldi supone otra inversión en talento por parte de la comisión deportiva blanquiverde. Si bien el pamplonés ha llegado en calidad de cedido por parte del Osasuna -opción de compra en el préstamo-, con el que todavía no ha debutado, aunque sí renovado su compromiso hasta 2026, su papel en el filial rojillo ha dejado números nada desdeñables. En tres cursos ha sido uno de los pilares de la producción ofensiva rojilla, hasta el punto de despertar el interés de equipos de la máxima categoría, tanto nacional como extranjera.
El sistema
El salto de división, por otra parte, ha obligado igualmente a Iván Ania a optar por un sistema más pragmático, menos enfocado en la faceta ofensiva, más aseado en la defensiva, aunque sin olvidar las grandes señas referentes de su plan: protagonismo con el esférico y juego exterior para finalizar jugada. Ha podido verse reflejado a lo largo de los diferentes duelos amistosos de puesta a punto, desde dominios más clarividentes en ciertas fases, como frente al Atlético Sanluqueño o el Recreativo de Huelva, incluso el Rayo Vallecano, hasta compases en los que aguardar replegado a la espera de una oportunidad al contraataque o de detectar alguna debilidad en el rival también han podido apreciarse sustancialmente, como frente al Cádiz -pese a que el pleito tan solo duró 45 minutos- o el propio Málaga.
Talento canterano
Cierra la nómina de claves otra gran noticia para la primera plantilla, que a lo largo de la concentración en el complejo hotelero-deportiva en tierras jerezanas, al igual que durante el transcurso de prácticamente toda la pretemporada, ha podido contar con la aportación de varios talentos efervescentes del Córdoba CF B reclutados para la ocasión. En ese sentido, los más destacados han sido el extremo Álvaro Vázquez, los laterales Adrián Vázquez y Josema Ortiz, el mediocampista Antonio Molina y el mediapunta Álvaro Peregrina, que junto al lesionado Álex López y Víctor Blanco -tampoco desplazado al stage- han acabado encabezando la hornada de alumnos aventajados del filial que llaman a la puerta en los planes del vestuario matriz.
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