El inicio de agosto encierra en Lucena una previa distante a la Feria Real de Nuestra Señora del Valle. Desde el Llanete anexo a la iglesia Madre de Dios al recinto, la Feria de San Francisco combina tradición, entre juegos populares, magia y sevillanas, y las propias atracciones de feria y un fortalecido programa musical.
Dos conciertos han despuntado en la configuración del área de Fiestas. Una sobresaliente afluencia de público respaldó sendos tributos, de Estopa y Fito y Fitipaldis, el viernes y el sábado, como reclamos principales en la Caseta Municipal del originario recinto ferial. La delegación de Fiestas calificó de «éxito», desde la jornada inicial, estas propuestas musicales. La composición se completaba, en la noche del viernes, con la procesión de San Francisco en el convento franciscano.
Un castillo hinchable entretiene, cada jornada, al público infantil en el clásico barrio. Con una inversión de 30.000 euros, el repertorio de conciertos incluyó, también, a Tete Pineda, en el Llanete, y en la Caseta Municipal a Cristian Coto y DJ Jesús.
