El Pleno del Ayuntamiento de Palma del Ríoha aprobado por unanimidad el Plan de Emergencia por Sequía del sistema de abastecimiento del término municipal. El concejal de Servicios Técnicos, Juan Trujillo, indicó que el asunto se abordó en la comisión de Cambio Climático Municipal y recordó que «este plan viene motivado porque nos obliga la ley desde el año 2001”, añadiendo que “es compromiso de este equipo de gobierno una gestión más eficaz del agua”.
El responsable municipal apuntó que “se van a tomar medidas después de 23 años”. Por su parte, la alcaldesa, Matilde Esteo, señaló que “sin este plan no podíamos tomar ningún tipo de acción, es un plan muy necesario para acometer medidas ante la sequía que está aquí”.
Pérdida de caudal
Juan Trujillo presentó un escenario sobre el agua potable de la ciudad, basado en un estudio económico y facturación, alertando de que “aproximadamente un 50% del agua no se sabe dónde está”, apuntando hacia pozos y enganches ilegales, las malas conducciones que provocan fuga y el suelo. El concejal indicó que «del agua recepcionada en la depuradora se factura en torno a un 50%”.
El documento, por tanto, surge de la exigencia normativa establecida a través de los Planes Hidrológicos y al compromiso por la excelencia en la prestación del servicio, teniendo en cuenta el tiempo actual de sequía y cambio climático.
El Ayuntamiento de Palma gestiona el abastecimiento directo de agua potable de una población superior a los 20.000 habitantes y el período de vigencia del Plan de Emergencia Municipal, PEM, es inicialmente de 6 años, duración del ciclo de planificación hidrológica. Se persigue «analizar y establecer el procedimiento de actuación necesario para gestionar los efectos negativos» y con el fin de maximizar la disponibilidad de agua requerida para asegurar la salud y la vida de la población.
Procedencia de los recursos
El estudio, realizado por la empresa 3CS Estrategia Económica, dibuja que los recursos de agua superficiales implicados en el abastecimiento son el río Bembézar y el río Retortillo, de donde llega al agua a otros municipios, la mayor parte de los cuales integran el consorcio de Aguas Plan Écija.
Entre las actuaciones reciente, en el plano de las conducciones, en el año 2023 el Consorcio de Abastecimiento y Saneamiento de Aguas Plan Écija, puso en servicio una nueva conducción. La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, a través de la Agencia Andaluza del Agua, acometió un proyecto que condujo a la nueva instalación entre la arqueta existente donde está la derivación de la conducción principal del Consorcio hasta la entrada a la nave de dosificación de carbón en el interior de la ETAP de Palma del Río.
Por otro lado, el concejal de Servicios Técnicos en el Ayuntamiento palmeño anunció inversiones en la estación de tratamiento de agua potable a través de líneas de financiación de Diputación de Córdoba. El edil ya ha advertido a lo largo de la presente legislatura de actuaciones necesarias en la planta que tiene 54 años de vida. Igualmente, avanza que las arcas municipales ya han recibido la aprobación de 300.000 euros de Diputación Provincial, solicitados a Planes Provinciales, para acometer la modernización del sistema de tratamiento y filtro de la ETAP.
En los últimos diez años se ha acometido un programa de mantenimiento de la infraestructura asociada al sistema de abastecimiento de agua, rehabilitación de la conducción principal desde la ETAP a la avenida de Santa Ana, sustitución de la red de distribución y renovación de la red de transporte en distintos barrios y diseminados, así como la rehabilitación del sistema de regulación de presiones en la red principal de suministro de agua de la ciudad,la nueva captación de agua bruta a la ETAPy LA red de control de puntos críticos. Por otro lado, Palma cuenta con una estación depuradora de aguas residuales, Edar, que trata las aguas residuales urbanas y otra Edar en el Baldío Sur que trata las aguas residuales de las urbanizaciones El Baldío y Baldío Sur.
En definitiva, el plan de emergencia por sequía recorre el agua bruta, el agua distribuida y el agua registrada y no registrada. Presenta un escenario para determinar una estrategia general de explotación de los recursos y la estrategia en condiciones de escasez coyuntural, un escenario de escasez en niveles, desde moderada (prealerta), severa (alerta) o grave (emergencia), estados en coherencia con las diferentes administraciones, como Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Los protocolos de prealerta, alerta y emergencia, teniendo en cuenta la reservas hídricas (volumen embalsado) conducirán a diferentes tipologías de acciones y medidas a activar, que van desde a vigilancia, cumplimiento ambiental, a medidas de persuasión para la reducción voluntaria de consumo, preparar instalaciones de emergencia, necesidad de modificaciones tarifarias, recursos externos, planes de comunicación a la población, restricciones obligatoria y penalizaciones. Según el grado decretado, se contempla dotación y horario de riego de jardines y zonas verdes, fuentes ornamentales, riego de calles, llenado de piscinas o limpieza de vehículos.