El economista José María Fanelli solía decir que hablar en jerga económico-financiera-macro sirve para mandarse la parte, intimidar a la audiencia y transmitir ‘éste sabe en serio’. Sin embargo los ministros de Economía en la Argentina, como enumeró el periodista Enrique Silberstein, tarde o temprano caen en la honestidad brutal del lenguaje llano, visceral y sin tecnicismos. El “no hay plata” de Javier Milei y Luis Caputo de 2023 tiene una saga de largas precuelas en una economía atrapada en su pasado. Complementando el short list del mismo Silberstein (ocho puntos que llegan hasta los años 70), acá van diez mandamientos de los ministros en la Argentina:
El país jamás estuvo peor.“El presidente de la República, Don Arturo Frondizi, tuvo oportunidad el 1° de mayo en su mensaje a la Asamblea Legislativa de señalar la gravedad de la situación económica que tiene que afrontar su gobierno, hoy, después del estudio de la situación económica y financiera y en posesión de cifras más exactas que reflejan la situación actual del cumplimiento de la ley de Presupuesto, el estado de balance de pagos y el índice de incidencia de la inflación sobre el valor adquisitivo de los salarios, podemos afirmar que, excepcionalmente, en la vida de la Nación, un gobierno debió iniciar su gestión en peores condiciones económicas”. Donato del Carril. 1958.
2. La gente ya entendió y hay que hacer toda clase de sacrificios para salir adelante.
“Creo que toda la Nación tiene conciencia de que la economía argentina está enferma desde hace ya mucho tiempo, que está estancada, que no crece y que ello da lugar a toda clase de frustraciones y tensiones, que afectan de una manera muy profunda la sustancia de la vida nacional”. Carlos Moyano Llerena. 1970.
3. Necesito un tiempo: dénme seis meses.
“Dénme ustedes un crédito de seis meses. No pedimos otra cosa. Seis meses y el trabajo de cada uno en provecho propio, no de nadie ni del Estado, sino en provecho propio. Seis meses de espera y a trabajar. Si esas condiciones básicas se alcanzan, septiembre y octubre serán tal vez los peores meses, pero a partir de ese momento la tendencia se habrá revertido. No creo que haya un sólo argentino que no esté dispuesto a realizar este sacrificio”. Álvaro Alsogaray. 1959.
4. La estabilidad es lo fundamental.
“No cabe duda de que la estabilidad monetaria constituye en cierto modo la base esencial para un programa de saneamiento y progreso económico”. Juan Carlos Pugliese. 1964.
5. La moneda sana es nuestro objetivo.
“Sostener la estabilidad monetaria e impulsar el desarrollo económico, ese será nuestro lema. La estabilidad monetaria es el instrumento más apto para afirmar la soberanía nacional en materia financiera y el vehículo para el reestablecimiento del crédito. Defender esa estabilidad será objetivo primordial de la política económica. Roberto Alemann. 1961.
6. La causa del déficit son las empresas públicas.
“La causa de la inflación está en el déficit del Presupuesto y que el factor esencial de ese déficit del Presupuesto es el déficit ferroviario. Este déficit ferroviario será atacado definitivamente, con lo cual cerraremos el rojo de las cuentas públicas y así la inflación”. Alsogaray. 1962.
7. Terminaremos con la burocracia.
“La racionalización de la administración pública será el medio primordial para alcanzar el equilibrio de las finanzas públicas. Se constituirá una comisión especial para la reubicación del personal de la administración pública y entes estatales, cuyo número excede los límites de funcionamiento racional”. Adalbert Krieger Vasena. 1968.
8. El déficit fiscal se reducirá hasta más allá de lo posible.
“La situación es grave. El déficit fiscal presiona sobre la tasa de interés, afecta las obligaciones básicas del Estado y perjudica al conjunto de la economía. Debo ser sincero ante este Congreso. El Presidente (N.E.: Fernando de la Rúa]) no quiere más impuestos pero hay que bajar el déficit fiscal. Vamos a afrontar la crisis con coraje”. José Luis Machinea. 2000.
9. Suframos hoy, que mañana estaremos bien.
“Nuestra próxima generación se beneficiará durante los próximos años de los frutos de sus esfuerzos y sacrificios actuales: así ha sucedido no hace mucho tiempo en otras naciones occidentales como la nuestra”. Alemann. 1962.
10. Hace falta la ayuda del FMI.
“Es muy difícil que este mes puedan pagarse a tiempo los sueldos de los estatales. Se están juntando los últimos pesos que entran para tratar de hacerlo, pero no hay garantías todavía que lo vayamos a poder a hacer. En todo caso, ellos de ninguna manera hubieran podido pagarse en su totalidad si no hubiera mediado el último depósito en dólares del Fondo Monetario Internacional. Estamos viviendo de préstamos extranjeros. Las medidas en curso, la contracción drástica de los gastos del gobierno y los recursos del país permiten que podamos lanzar una nueva fórmula: hay que pasar el invierno”. Alsogaray. 1959.